El presidente sirio, Bashar al-Assad, ha criticado a Occidente diciendo que cualquier cooperación en materia de seguridad con las naciones occidentales o la reapertura de sus embajadas no ocurrirán hasta que rompan los lazos con grupos de oposición y insurgentes.
Poco después de que al-Assad diera su discurso, una concha golpeó la primera feria internacional en el país desde que comenzó la guerra hace seis años, matando e hiriendo a varias personas.
Los desafiantes comentarios de al-Assad llegan en un momento en que sus tropas y milicias pro iraníes están ganando terreno en todo el país bajo la cobertura de los ataques aéreos rusos. Muchos países han dejado de pedirle que dimita.
En declaraciones ante decenas de diplomáticos sirios en Damasco, al-Assad elogió a Rusia, Irán, China y el Hezbollah de Líbano por apoyar a su gobierno durante el conflicto. Dijo que Siria miraría al este cuando se tratara de relaciones políticas, económicas y culturales.
“El apoyo directo de nuestros amigos, políticamente, económicamente y militarmente, hizo que nuestro avance sobre el terreno fuera mayor y las pérdidas de guerra menos. Por lo tanto, son nuestros socios en estos logros en el camino para aplastar el terrorismo “, dijo al-Assad.
“Seamos claros. No habrá cooperación de seguridad ni apertura de embajadas o incluso un papel para algunos países que dicen que quieren jugar un papel en poner fin a la crisis en Siria antes de que claramente y francamente cortar sus relaciones con el terrorismo. En ese momento tal vez podamos hablar de abrir embajadas “.
Después de meses de constantes avances militares, el gobierno de Siria ha tratado de presentarse como el vencedor en una guerra que está cayendo y está mirando hacia la reconstrucción. El presidente sirio dijo que la economía de su país estaba volviendo a crecer de nuevo “a un ritmo muy lento, aunque estamos bajo un embargo casi completo”.
El gobierno había anunciado la feria internacional, que se inauguró hace tres días, como una victoria y un signo de renovada confianza en la nación devastada por la guerra.
La página de Facebook de Mortar News en Damasco, que registra la violencia en la capital, dijo que la nave golpeó la entrada de la feria, matando a cuatro personas e hiriendo a otras cuatro.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos de Gran Bretaña, un grupo dirigido por la oposición que informa sobre ambos lados del conflicto, dijo que el caparazón mató a cinco personas e hirió a 11, pero no dijo quién estaba detrás del ataque.
La agencia de noticias estatal dijo que los bombardeos causaron víctimas, pero no dio más detalles. Se culpó a los rebeldes en los suburbios de la capital, diciendo que dispararon la cáscara en violación de una tregua alcanzada a principios de este mes en los suburbios del este de Damasco conocido como Ghouta oriental.
Con información de The Guardian
