Anulan la pena de muerte al expresidente egipcio Mohamed Mursi

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Corte de Casación de Egipto anuló este martes la pena de muerte dictada contra el expresidente Mohamed Mursi por su fuga de una cárcel durante la revolución de 2011, y ordenó que se repita el juicio.
Derrocado en julio de 2013, Murci recibió la pena capital por urdir su fuga de la cárcel de Wadi Natrun en junio de 2015, en una causa en la que también fueron sentenciados a la horca otros 108 acusados, en su mayoría miembros o simpatizantes de los Hermanos Musulmanes.
El tribunal aceptó el recurso presentado por el exmandatario egipcio y otros 26 condenados a muerte y a cadena perpetua, indicaron fuentes judiciales a la agencia EFE.
Entre ellos figuran el entonces líder espiritual de la cofradía, Mohamed al Badía, y los dirigentes Saad Katatni y Esam al Arian, quienes se desempeñaron como presidente y vicepresidente del brazo político de la Hermandad, el Partido Libertad y Justicia.
Todos ellos fueron sentenciados por el Tribunal Penal de El Cairo el 16 de junio de 2015, por haber huido de la cárcel y haber ayudado a escapar a más de 20 mil reos de tres prisiones egipcias, en el marco del caos de la revolución de 2011, que llevó al derrocamiento del entonces presidente Hosni Mubarak.
Estos actos, junto al secuestro de oficiales y el asesinato de policías y presos, fueron realizados por los Hermanos Musulmanes, en coordinación con el movimiento islamista palestino Hamás, el grupo chií libanés Hizbulá y yihadistas del norte de la península del Sinaí, según el fallo.
Mursi, encarcelado en la prisión de Burg al Arab, en el noreste de Egipto, y con varias condenas a sus espaldas, ha negado siempre los cargos y ha destacado que sigue siendo el “presidente legítimo” de Egipto.
El exmandatario también fue condenado a cadena perpetua en dos causas diferentes, una de colaboración con organizaciones extranjeras para planear ataques en Egipto, y otra de espionaje a favor de Catar.
De igual manera, fue sentenciado a 20 años de cárcel por el uso de la violencia durante los disturbios ocurridos cerca del Palacio Presidencial de Itihadiya, en El Cairo, en diciembre de 2012. La pena se confirmó en octubre pasado.