LONDRES, Inglaterra.- No fue el retiro esperado. Usain Bolt se lesionó a unos metros de la meta en la final de relevos 4×400 en el Mundial de Atletismo en Londres Inglaterra. Un triste final para un grande.
Usain Bolt, once veces campeón mundial y ocho olímpico, pso fin a su carrera deportiva.
Estaba por llegar a la meta cuando el destino le tenía una mala jugada, Bolt se trastabilló y cayó al suelo entre gestos de dolor. Allí permaneció durante dos minutos, ocultando su cara con las manos, antes de incorporarse para entrar caminando en la meta.
Finalmente, se abrió la posibilidad para que la medalla de oro se la llevara Gran Bretaña, que con un crono de 37.47 batió al equipo favorito de Estados Unidos (37.52), y a Japón (38.04).
Así fue el adiós de un grande, un adiós doloroso para más grande de todos los tiempos, que llegó a la meta junto con sus tres compañeros de relevos en la escena más dramática de los campeonatos del mundo.
Sin embargo, Bolt puede presumir que se llevó el cariño y reconocimiento de la gente que le aplaudió y se le entegó en cada competencia.
El mundo seguirá adelante, pero sin Bolt, quien puso fin a una brillante carrera.
El rey de los deportes, sumido en una crisis desde hace lustros y con la imagen destrozada por el dopaje y la corrupción, se queda huérfano con la retirada del hombre sobre cuyas espaldas ha gravitado el crédito del atletismo desde hace diez años, Usain Bolt.
Usain llega al final de una carrera inimitable como el hombre más rápido del planeta, el más querido.
Con información de AFP
