El ‘burdel municipal’ es una iniciativa del ayuntamiento para permitir a las prostitutas manejar su propio burdel en un intento de mejorar las condiciones de trabajo
En un intento de mejorar las condiciones de trabajo en la industria del sexo de la ciudad, un burdel dirigido por las prostitutas mismas será inaugurado hoy por el alcalde de Amsterdam.
Una iniciativa del ayuntamiento, el nuevo burdel ocupa 14 “ventanas” a través de cuatro edificios en el llamado distrito rojo de Ámsterdam. Alrededor de 40 trabajadoras del sexo podrán operar fuera de las instalaciones, que están siendo dirigidas por una fundación llamada My Red Light, en la cual las prostitutas toman parte activa.
“Todo en este proyecto, desde los estatutos hasta la decoración de las habitaciones, es pensado por las trabajadoras sexuales”, dijo una de las prostitutas involucradas, que pidió permanecer en el anonimato. “Espero que My Red Light ofrezca espacios de trabajo agradables, donde las trabajadoras sexuales puedan ser quienes son y sentirse bienvenidas”.
La prostitución ha sido legal en los Países Bajos desde el año 2000. Los propietarios de negocios sexuales deben obtener una licencia y cumplir con las normas municipales, mientras que la prostitución es una profesión legal y se espera que sus profesionales paguen impuestos.
Los holandeses esperaban que al legalizar la prostitución crearían una industria sexual “limpia”, donde los trabajadores sexuales independientes podrían ganar dinero sin impedimentos por los proxenetas.
No funcionó de esa manera. Amsterdam ha seguido siendo un destino importante para los traficantes de personas, a menudo a través de bandas criminales de Europa oriental.
Con esta nueva iniciativa, Amsterdam espera permitir que las prostitutas trabajen de manera independiente.
Con información de The Guardian
