Basuki Tjahaja Purnama concedió la victoria a Anies Baswedan después de una campaña en la que lo dividido de las tensiones religiosas y étnicas fueron clave.
YAKARTA, INDONESIA.- El gobernador de Yakarta, Basuki Tjahaja Purnama, más conocido por su apodo de Ahok, ha concedido la victoria al rival candidato Anies Baswedan en una segunda vuelta electoral después de una campaña polarizada y cargada que expuso lo dividido entre las religiones y etnias en la capital de Indonesia.
“Felicidades Anies y Sandi y todo su equipo y simpatizantes”, dijo Ahok, refiriéndose al compañero de equipo de Basowedan, el empresario Sandiaga Uno. “Todos queremos un mejor Yakarta, queremos que Yakarta sea nuestra casa juntos”.
Los resultados extraoficiales de “conteo rápido” de las elecciones del miércoles sugirieron que Basówán, un musulmán, había ganado la segunda vuelta cómodamente contra Ahok, un cristiano de la minoría étnica china del país.
Los recuentos rápidos, que se basan en muestras de votos de los colegios electorales, suelen usarse como orientación en países donde los resultados oficiales no se publican hasta semanas después de las elecciones.
Horas después de que se cerrara la votación, varios encuestadores creíbles dieron a Baswedan una ventaja decisiva de unos 15 puntos.
Un país divido
Los asuntos religiosos dominaron la campaña en la capital de la mayor nación musulmana del mundo. Ahok, quien es acreditado por sus partidarios con la represión de la corrupción, la racionalización de la burocracia y la lucha contra los problemas de infraestructura, fue bien en las encuestas hasta que fue acusado de insultar al Islam en la campaña en septiembre, cuando citó un verso del Corán. Siguió un proceso de blasfemia, lo que ha afectado considerablemente su popularidad.
Varias protestas de masas encabezadas por extremistas islámicos a finales del año pasado calificaron a Ahok como un kafir (infiel), pidieron su arresto y ayudaron a generar impulso para la idea de que los musulmanes deberían rechazar a los líderes no musulmanes.
Banderas y panfletos con mensajes discriminatorios, incluyendo amenazas de que los musulmanes que votaron por Ahok se les negaran los ritos funerarios islámicos, fueron ampliamente distribuidos entre los densos barrios de Yakarta.
Ahok también criticó por su impetuosa manera y por el polémico desalojo de las comunidades pobres de la orilla del río, pero en la mente de algunos votantes su afiliación religiosa eclipsó todas las demás cuestiones.
Asep Suribayana -uno de los más de 7 millones de residentes registrados para votar en las elecciones del miércoles- dijo que votó a lo largo de líneas religiosas.
“Ahok ha hecho un buen trabajo, tiene buenas ideas. El problema para mí es realmente sólo en relación con Al Maidah “, dijo. “Quiero que Yakarta sea pacífica así que elegí un líder que siga el Islam”.
Los votantes como Suribayana creen que Al Maidah obliga a los musulmanes a elegir líderes musulmanes.
Baswedan acusado de lucrar con las divisiones
Baswedan, ex ministro indonesio de Educación y Cultura, ha sido acusado por críticos de capitalizar el electorado teológicamente dividido. Baswedan, y su compañero de campaña, Uno, niegan los cargos.
Ahok prometió trabajar duro durante los seis meses restantes en el cargo y ayudar al par ganador con cualquier solicitud.
El resultado del miércoles, visto como influyente en la votación presidencial de 2019, está siendo observado de cerca por los observadores.
Con más de 60.000 efectivos de seguridad desplegados en la capital, la votación se llevó a cabo sin problemas en más de 13.000 centros de votación, aunque hubo informes de que los votantes se intimidaban.
Después de votar en el centro de Yakarta, el presidente indonesio, Joko Widodo, él mismo un ex gobernador de Yakarta, pidió la reparación de las divisiones políticas.
“Las diferencias políticas no deben romper nuestra unidad”, dijo. “Todos somos hermanos y hermanas. Quien sea elegido, debemos aceptarlo. “
Se espera que los resultados oficiales se publiquen en la primera semana de mayo.
Con información de The Guardian
