Un candidato poco conocido emergió como la estrella del debate presidencial francés televisado después de desafiar a dos de los principales candidatos por su deshonestidad e implicación en escándalos de fraude.
El militante Philippe Poutou, del Nuevo Partido Anticapitalista, agredió contra la favorita de extrema derecha, Marine Le Pen, y el conservador François Fillon, quienes están bajo investigación por mal uso de fondos públicos.
Mientras que los otros 10 candidatos se aferraron a sus programas políticos durante el debate televisivo de cuatro horas –que fue visto por 6 millones de espectadores– Poutou estaba decidido a dirigirse al elefante en la habitación.
Poutou (cuyo nombre significa “besito” en francés), que se negó a posar con los demás para la fotografía oficial, diciendo “no son mis colegas” le dijo a Le Pen que los trabajadores ordinarios no tenían la opción de ignorar una citación legal.
Se le ordenó a Le Pen comparecer ante un juez por las acusaciones de que utilizó los fondos del Parlamento Europeo para pagar por el personal del Partido Nacional del Frente (FN) que lidera, incluido su guardaespaldas personal, pero se negó a acudir. Ella ha argumentado que no usó el dinero para el enriquecimiento personal y afirmó que estaba siendo victimizada.
Poutou luego se volvió contra Fillon, que ha sido formalmente puesto bajo investigación por cargos de que pagó a su esposa cientos de miles en dinero de los contribuyentes por empleos que no existían. Fillon ha admitido “cometer errores”, pero negó cualquier falta legal.
“Desde enero, ha sido una fiesta. ¿Fillon? Nada más que corrupción; Cuanto más sale a la luz, más se huele la corrupción y el engaño … es lo mismo con Marine Le Pen, que está pellizcando de los fondos públicos, y el FN, que se supone que es anti-sistema, no se molesta porque está protegida gracias a la inmunidad parlamentaria “.
Mientras continuaba, Fillon frunció el ceño y murmuró: “Voy a demandarte, joder.”
La candidata de Lutte Ouvrière (Lucha Obrera), Nathalie Arthaud, también atacó a Fillon. “Cuando escuchamos que el Sr. Fillon quiere quitar los privilegios de los trabajadores de los ferrocarriles cuando es, digamos, liberalmente generoso consigo mismo, eso sacude a la gente. No encuentro esto normal […] usted ha admitido cometer errores, pero la gente ha sido expulsada de sus trabajos por menos “, dijo.
Poutou, de 50 años, hijo de un cartero, abandonó la escuela sin titularse después de haber fracasado en su bachillerato en mecánica. Él trabaja actualmente en una fábrica de Ford que repara las máquinas de la línea de producción.
Llegó al estudio llevando una camiseta beige –en marcado contraste con los otros candidatos masculinos en trajes y corbatas– y fue combativo desde el principio.
Al ser invitado a presentarse, dijo: “Soy trabajador de una fábrica y aparte de Nathalie Arthaud, creo que soy el único que tiene un trabajo normal”, agregando que estaba en contra de los “indecentes ricos”.
Cuando los moderadores señalaron que estaba sobrepasando el límite de tiempo, Poutou dijo: “Sólo porque no llevo corbata, no significa que puedas interrumpirme”.
En un momento añadió: “Todo el mundo está harto de políticos corruptos, y algunos aquí lo saben”.
Poutou estuvo en la elección presidencial de 2012, con el lema “Dejar que los capitalistas paguen por sus crisis”, y obtuvo el 1.15% de los votos –411,160– en la primera ronda.
Esta vez su lema es: “Nuestras vidas, no sus ganancias”.
Una encuesta de Ipsos sugirió el miércoles que el 65% de los encuestados consideraran la honestidad y la probidad importantes en un líder.
Las encuestas después del debate sugirieron que el candidato de izquierdas Jean-Luc Mélenchon había aparecido como “el más convincente”. Sin embargo, las encuestas sugieren que Le Pen y el candidato independiente Emmanuel Macron siguen siendo favoritos para pasar de la votación de primera ronda el 23 de abril a la segunda ronda una quincena más tarde.
