El Papa ha instado a los líderes europeos a resistirse a las “falsas formas de seguridad” prometidas por aquellos que quieren aislarse, pocos días antes de que Theresa May inicie las negociaciones del artículo 50.
En un discurso en el Vaticano, el Papa advirtió que los europeos parecían haber olvidado la “tragedia” de las divisiones del pasado.
También sugirió que, a menos que la UE mostrara una visión para su futuro, podría desmoronarse. “Cuando un cuerpo pierde su sentido de dirección y ya no puede mirar hacia adelante, experimenta una regresión y, a la larga, corre el riesgo de morir”, dijo el Papa.
Francisco estaba hablando a los 27 líderes de los Estados miembros de la UE que permanecerán una vez que el Reino Unido se vaya, en vísperas de una cumbre en Roma con motivo del 60 aniversario de la fundación de la Unión Europea.
Afirmó que los políticos estaban siendo guiados por el miedo y las crisis, pero advirtió de los peligros en el populismo egoísta que “atrapa a la gente y les impide superar y mirar más allá de su propia visión estrecha”.
Él dijo: “Europa encuentra nueva esperanza cuando se niega a ceder al miedo o a encerrarse en falsas formas de seguridad. La política necesita este tipo de liderazgo que evite apelar a las emociones para obtener el consentimiento, y que en lugar de ello, en un espíritu de solidaridad y subsidiariedad, elabora políticas que pueden hacer que la unión en su conjunto se desarrolle armoniosamente “.
Añadió que los líderes de los seis países que fundaron la Comunidad Económica Europea el 25 de marzo de 1957 habían mostrado fe en el futuro a raíz de una guerra destructiva.
“Ellos no carecían de audacia, ni actuaron demasiado tarde”, dijo. “Estaba claro desde el principio que el corazón del proyecto político europeo sólo podía ser el hombre mismo.”
“El primer elemento de la vitalidad europea debe ser la solidaridad”, agregó, describiendo el principio como “el antídoto más eficaz contra las formas modernas del populismo”.
Francisco no mencionó al Brexit por su nombre, aunque habló de la solidaridad debida a Gran Bretaña para llorar el ataque de esta semana contra el puente de Westminster y el Parlamento que dejó cinco muertos, incluido el agresor.
Francisco, hijo de inmigrantes italianos en Argentina, también insistió en que Europa continúe abriendo sus puertas a los inmigrantes que huyen de la guerra y la pobreza.
Dijo: “Sin un enfoque inspirado por esos ideales, terminamos dominados por el temor de que otros nos arranquen de nuestros hábitos habituales, nos priven de las comodidades familiares y de alguna manera pongan en tela de juicio un estilo de vida que con demasiada frecuencia consiste solo en la prosperidad material.”
Al final de la audiencia, Francisco saludó a cada uno de los líderes, dando un abrazo al presidente francés François Hollande. Los líderes posaron con el Papa para una foto en la Capilla Sixtina delante del Juicio Final de Miguel Ángel.
Gran Bretaña debe notificar formalmente a la UE de su intención de salir del sindicato en una carta el 29 de marzo.
