La Paz, Baja California Sur – El Consejo Sudcaliforniano de Ciencia y Tecnología (Coscyt) informó que a través del programa Mujeres a la Ciencia —en el que colaboran mujeres profesionistas pertenecientes a centros académicos y de investigación— han incidido en estudiantes mujeres de nivel medio superior, en el descubrimiento de vocaciones científicas y tecnológicas.
La directora del Coscyt, la doctora Laura Mónica Treviño Carrillo, mencionó que el programa tiene el objetivo de disminuir la deserción escolar en el nivel superior y aumentar la participación de las mujeres en la ciencia.
“El programa Mujeres a la Ciencia consiste en motivar a las jóvenes que residen en Baja California Sur para que sigan estudiando, continúen con su desarrollo profesional y se interesen en la ciencia y tecnología”, afirmó Treviño Carrillo.
La funcionaria precisó que en 2014 lograron la participación en el programa de alrededor de sesenta estudiantes de preparatoria, para 2015 la cifra aumentó a cien y en 2016 estiman una participación de hasta doscientas jóvenes.
En esta edición, además cuentan con la participación de 74 profesionistas entre investigadoras, académicas, administradoras y directoras de centros educativos y de investigación, quienes interactúan con las jóvenes estudiantes.
“Tenemos chicas que antes de decidir qué estudiar, ya están teniendo prácticas voluntarias en centros de educación superior como la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS) y el Tecnológico de La Paz (ITLP) —que es parte del sistema del Tecnológico Nacional de México (Tecnm)—, para conocer más sobre laboratorios y centros de investigación”, afirmó Treviño Carrillo.
“(A las estudiantes) se les motiva por medio de entrevistas directas con las investigadoras, se realizan visitas a los centros de trabajo (de las investigadoras) para que las jovencitas observen el quehacer científico en estos sitios de trabajo y/o la investigadora les explica, en los centros educativos (de nivel medio superior), el quehacer científico al que se dedica y por qué se dedica a ese campo de investigación, además comparte su lado humano, para que ellas (las estudiantes) lleguen a ver a las investigadoras como un ejemplo a seguir, desarrollándose académicamente y, en un momento dado, profesionalmente”, explicó.
Cibnor colaborador activo del programa Mujeres a la Ciencia
La doctora en ciencias Sara Cecilia Díaz Castro, quien es coordinadora del Programa de Acercamiento a la Ciencia (PACE) del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), mencionó que el Cibnor participa activamente en las dinámicas del programa Mujeres a la Ciencia, abriendo sus espacios de investigación a las jóvenes seleccionadas por el Coscyt, para que ellas colaboren con los investigadores y, a su vez, puedan retroalimentarse de las experiencias que los científicos les comparten.
“Las jóvenes seleccionadas por el Coscyt pasan un día con diferentes investigadores en el Cibnor, en el cual se llevan a cabo prácticas en laboratorio y pláticas de acercamiento a la ciencia, además conocen el lado humano de los investigadores”, comentó la doctora Díaz Castro, quien además es colaboradora activa del programa.
“Hemos tenido jovencitas que han visitado algunos de los laboratorios en donde trabajan con diferentes tipos de peces, (en donde) les enseñaron a identificarlos, cómo se capturaban y por qué es importante tener una colección de referencia de los peces de la región. Otras jovencitas también trabajaron con equipo muy sofisticado de análisis bioquímico en laboratorio; y en mi caso, que me dedico a la divulgación de la ciencia en el PACE, pero también a la investigación sobre cambio climático, les he enseñado parte de los resultados de proyectos de investigaciones y su aplicación, además de que nos han acompañado a realizar actividades de acercamiento a la ciencia, la cual es también una parte muy importante de la ciencia: poder transmitirla a los demás”, agregó.
La doctora Díaz Castro agregó que estas actividades de acercamiento personal hacia las estudiantes, a diferencia de dinámicas grupales como las conferencias, “pueden dejar una huella más profunda” en la persona, que a la joven puede ayudar a decidir dedicarse a una carrera científica.
“No necesariamente es bueno que todos sean científicos, pero el que sean personas observadoras y conscientes, que se pregunte el porqué de cada cosa, con eso sale ganando la sociedad”, finalizó Díaz Castro.
