Leyes como espadas

Fue la semana pasada cuando el alcalde saliente Jorge Astiazarán invocó la ley para advertir que su antecesor Carlos Bustamante no reabriría su casino -en una acción que en realidad defiende los intereses de su patrón, Jorge Astiazarán-, pero nada dice de los cientos de permisos para el ambulantaje que su gobierno ha vendido a través de la Dirección de Inspecció y Verificación.

De nuevo la Ley se esgrime como si fuera emitida por Dios o entidad superior. De leyes poco sabe Astiazarán pues lo que en su trienio prevaleció fueron los intereses.

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Tal como lo asentamos, son los últimos meses del año de Hidalgo para el gobierno de Jorge Astiazarán y los comerciantes de Tijuana ven con preocupación el crecimiento desmedido de permisos de ambulantes en puntos de la ciudad hasta antes vetados a esta actividad.

Guillermo Díaz Orozco, presidente de los Comerciantes del Centro de Tijuana, indica que “ya no quedan dos meses y empezaron con el año d Hidalgo hace tiempo el municipio así que ahorita esperamos más invasión de ambulantes porque los funcionarios no van a dejar de ir estos dos meses en blanco”.

Estos permisos, otorgados por la dirección de Inspección a cargo de José Antonio Olivas y con la bendición de Jorge Astiazarán, lo mismo se expiden para el centro que para Zona Río y para cualquier otra colonia de la periferia de la ciudad.

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Díaz Orozco indica que “es más si ahorita se hiciera una revisión veremos que todos los permisos que han extendido están fuera de reglamento, uno de los artículos dice que se debe presentar cualquier permiso so licitud a la comisión tripartita para que esta dé su opinión no su decisión, simple opinión y todos se han expedido es más no han citado siquiera a junta pese a que se ha insistido porque no lo hacen porque la comisión tripartita va a aplicar el reglamento y va a parar muchas triquiñuelas que se hacen adentro”.

Y es que mientras Astiazarán Orcí luchaba contra su antecesor Carlos Bustamante para volver a cerrar su casino, invocando una ley que solo aplica cuando los intereses de su patrón son lastimados, el ambulantaje crece a la sombra de su gobierno