WASHINGTON (apro).– México es el principal país proveedor de drogas de los Estados Unidos y pese a los esfuerzos del gobierno de Enrique Peña Nieto por combatir al trasiego de narcóticos, la corrupción por narcotráfico socava los avances en el combate al flagelo, determinó el Departamento de Estado.
En su Reporte Anual 2017 de la Estrategia para el Control de los Narcóticos, el Departamento de Estado apunta que el territorio mexicano es el corredor más utilizado por los narcotraficantes para meter todo tipo de drogas a los Estados Unidos.
“Casi todos los derivados de opio que se encuentran en Estados Unidos, son producidos o traficados a través de México; por las organizaciones del tráfico de drogas de ese país”, se lee en el informe firmado por el expresidente Barack Obama.
En la evaluación correspondiente a la lucha contra el narcotráfico en el año 2016, el Departamento de Estado expone su preocupación por el incremento en los cultivos de amapola en México. “De las 11 mil hectáreas que había en 2013 para el cultivo de amapola, en 2015 se pasó a 28 mil hectáreas”, acotó el gobierno de los Estados Unidos.
El informe, que ya fue enviado al Congreso federal estadounidense, apunta que uno de los principales problemas por los cuales el gobierno mexicano no ha podido contener la producción y tráfico de drogas, es la corrupción gubernamental y policial.
“Muchos agentes de la aplicación de la ley y funcionarios mexicanos a nivel local, siguen estando pobremente compensados por su trabajo, no cuentan con el apoyo necesario para hacerlo, están mal entrenados y eso los hace vulnerables a la corrupción”, destaca el reporte del Departamento de Estado.
El gobierno estadounidense consideró que aunque es “dispareja” la lucha contra la corrupción que lleva a cabo el gobierno mexicano, han logrado detectar y remover de sus puestos a policías y funcionarios públicos corrompidos por el narcotráfico.
En el inciso sobre México, el reporte del Departamento de Estado reconoce a su vez que aun cuando se han fortalecido las instituciones gubernamentales, la situación en el país relacionada la problemática del narcotráfico sigue endeble.
Por ejemplo, cita que en los primeros nueve meses de 2016, “México vivió un incremento del 20% en el número de asesinatos relacionados al tráfico de drogas”.
El Departamento de Estado añadió que México es para Estados Unidos una mayor fuerza de producción de drogas, como heroína, mariguana y metanfetaminas; y la ruta principal para el trasiego de cocaína y todo tipo de drogas producidas y elaboradas en países, como Colombia y las naciones centroamericanas.
