Un funcionario de salud italiano ha culpado a un aumento alarmante de los casos de sarampión al movimiento populista de Cinco Estrellas (M5S), que ha hecho campaña en una plataforma anti-vacunación y ha repetido los vínculos desacreditados entre las vacunas y el autismo.
Según el Ministerio de Salud, se han registrado más de 700 casos de la enfermedad altamente contagiosa hasta el año 2017, en comparación con 220 en el mismo período del año pasado y 844 en todo el año 2016.
El aumento del número de casos se debe a una disminución de la proporción de niños de dos años que recibieron vacunas del 88% en 2013 al 86% en 2014 y al 85,3% en 2015, muy por debajo del umbral del 95% recomendado por la Organización Mundial de la Salud.
En 2015, la M5S propuso una ley contra la vacunación debido a “la relación entre las vacunas y enfermedades específicas como leucemia, envenenamiento, inflamación, inmunodepresión, mutaciones genéticas heredables, cáncer, autismo y alergias”.
El líder del partido, Beppe Grillo, dijo en su blog el mismo año: “Las vacunas han jugado un papel fundamental en la erradicación de enfermedades terribles como la poliomielitis, la difteria y la hepatitis. Sin embargo, traen un riesgo asociado con los efectos secundarios que son generalmente temporales y asumibles, pero en casos muy raros, pueden ser tan severos como conseguir la misma enfermedad que usted está intentando erradicar. “
El brote de sarampión este año se ha concentrado principalmente en las regiones ricas de Piamonte, Lacio, Toscana y Lombardía. Algunos médicos en estas áreas han estado animando activamente a los padres a no darle a sus hijos las inyecciones. Turín en el Piamonte y Roma en el Lacio eligieron alcaldes del M5S el junio pasado.
Ranieri Guerra, director general de salud preventiva del Ministerio de Salud, dijo: “La gente de la M5S dice que el sarampión es normal, y que cada tres años tenemos un pico, así que ¿por qué es peligroso? Bueno, digo que no es normal tener picos o brotes; se supone que debemos ser un país libre de sarampión “.
La semana pasada, Beatrice Lorenzin, ministra de Salud de Italia, emitió una fuerte defensa de las vacunas en respuesta a las nuevas cifras. “La única arma que tenemos contra enfermedades graves como el sarampión es la vacunación: suficiente con la información falsa. No hay correlación entre las vacunas y el autismo “, dijo.
Andrea Liberati, un funcionario de la M5S en la región de Umbría, dijo que el aumento nacional en casos de sarampión fue el resultado de información confusa.
“No es que estemos totalmente en contra de las vacunas, pero el gobierno necesita enviar un mensaje más claro; los padres están muy confundidos por la información contradictoria”, dijo. Liberati, quien también afirmó: “Obviamente, [también] hay un elemento comercial para esto, y la necesidad de grandes empresas farmacéuticas para ganar dinero”.
Preguntada en noviembre del año pasado sobre algunas de las teorías menos comunes que el partido ha apoyado, la eurodiputada M5S Laura Ferrara negó que se oponga a las vacunas, pero dijo que quería instar a los padres a estar más vigilantes sobre qué vacunas les dieron a sus hijos.
La percepción de los italianos acerca de la inocuidad de las vacunas fue fuertemente influenciada por las declaraciones, ahora desacreditadas, de una conexión entre la vacunación combinada contra el sarampión, las paperas y la rubéola (MMR) y el autismo. En un caso de alto perfil en 2012, un tribunal de Rímini concedió una indemnización a la familia de un niño autista después de dictaminar que el autismo del niño fue causado probablemente por la vacuna MMR, dictaminación que alarmó a los padres de familia, a pesar de que la sentencia fuese anulada en apelación tres años después.
Estos temores, combinados con una falta de confianza en los políticos, han dejado a muchos padres agonizando sobre si vacunar a sus hijos.
Michele Marchesani y su esposa lucharon para decidir si inyectar o no a su hija, ahora de 15, contra el sarampión. Finalmente aceptaron no hacerlo, una decisión influenciada en parte por los siete años que Marchesani, un fisioterapeuta, había pasado trabajando con un niño autista.
“Sus padres creían que el autismo fue causado por la vacunación contra el sarampión”, dijo. “Ellos hicieron campaña e intentaron llevarlo a los tribunales, pero no llegaron a ningún lado con él … Confiaría más en la inyección si, digamos, un amigo me convenciera de que era lo correcto, pero no cuando se trata de un político.”
Elettra De Marches, una madre de mellizos de 16 años, también rechazó la campaña. “Mis hijos tuvieron sarampión”, dijo. “Es una enfermedad manejable. No hay necesidad de una inyección, es sólo para fines comerciales “.
Los síntomas iniciales del sarampión incluyen fiebre, ojos rojos y sensibilidad a la luz, manchas blancas grisáceas en la boca y la garganta y síntomas similares al frío. La erupción del sarampión aparece típicamente después de dos a cuatro días. La enfermedad puede ser muy debilitante, y aunque la mayoría de la gente se recupera completamente, puede tener complicaciones muy graves, incluyendo ceguera y muerte.
El gobierno italiano se esfuerza por abordar los temores infundados sobre las vacunas como parte de una nueva estrategia centrada en las redes sociales.
“Los canales de información institucionales habituales no funcionan”, dijo Guerra. “El valor de la inmunización necesita ser comunicado en un lenguaje que sea fácilmente entendido por los padres más jóvenes, ya que es donde la mayor concentración de dudas hay ahora.”
“Estamos hablando de dejarles saber qué información apropiada pueden acceder, en lugar de usar cualquier basura que se publique en Internet, porque eso es otro problema”.
El gobierno también está buscando formas de procesar a los médicos que persuaden activamente a los padres contra la vacunación. “Esto es inaceptable … está cerca de ser un crimen”, agregó Guerra.
