CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un atentado suicida durante una manifestación de protesta en la ciudad de Lahore, al este de Paquistán,dejó al menos diez personas muertas y otras 58 heridas.
El ataque, cuya autoría se atribuyó Jamaat-ul-Ahrar, una facción talibán paquistaní, ocurrió una semana después de que autoridades de seguridad y de contraterrorismo del estado advirtieron sobre un posible atentado en Lahore contra instalaciones vitales, como edificios públicos, hospitales y escuelas.
Los hechos se registraron alrededor de las seis de la tarde (hora local), cuando un suicida a bordo de una motocicleta se filtró entre la multitud que se manifestaba frente a la Asamblea de Punjab, en pleno centro de Lahore, y embistió a varios farmacéuticos que protestaban contra las nuevas leyes locales sobre la venta de productos químicos usados como drogas por muchos adictos.
La explosión, en la que murió Ahmad Mobin, jefe de la Dirección de Tráfico, se produjo cuando los responsables policiales negociaban con los manifestantes para poner fin a la protesta y así poder despejar el área cercana a Asamblea.
Al lugar del ataque llegaron los servicios de rescate, incluidos elementos del Departamento de Bomberos, para atender a los heridos, quienes fueron trasladados a los hospitales May y Ganga Ram de Lahore. También arribaron contingentes del Ejército de Pakistán para apoyar a las fuerzas de seguridad locales.
En un mensaje de texto enviado a varios medios locales, el grupo Jamaat-ul-Ahrar se atribuyó el ataque en venganza por las operaciones realizadas por Pakistán contra militantes islámicos en las regiones tribales a lo largo de la frontera con Afganistán.
El jefe del Ejército, general Qamar Javed Bajwa, dio instrucciones a los comandantes militares locales y a las agencias de Inteligencia para proporcionar la asistencia necesaria a las autoridades civiles, con el fin de atrapar a los responsables del atentado.
“No pararemos hasta que podamos llamarnos a nosotros mismos un pueblo libre y seguro”, prometió a su vez el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif.
En marzo de 2016, en un acto suicida reivindicado por el Jamaat-ul-Ahrar (JuA), escisión del principal grupo insurgente de Pakistán, el Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), 72 personas murieron y 359 resultaron heridas en la misma ciudad de Lahore.
