Neoyorquinos protestan contra el primer viaje de Trump a Nueva York desde enero

Manifestantes neoyorquinos se reunieron cerca de donde Trump debía pronunciar un discurso en Manhattan, donde vivió la mayor parte de su vida, pero sigue siendo extremadamente impopular

Cerca de mil neoyorquinos protestaron contra Donald Trump en la ciudad de Nueva York el jueves, cuando el presidente estaba preparado para hacer su primer viaje a casa desde su inauguración.

Los manifestantes se reunieron en el lado oeste de Manhattan a las 2 pm, a pocas cuadras de distancia de donde Trump debía pronunciar un discurso en el desarmado portaaviones USS Intrepid.

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Se golpearon muchas cacerolas hacia el Intrepid, en un guiño a las protestas de cacerolazo de los países de habla hispana, y el mitin tuvo un fuerte tema de inmigrantes.

“Dilo fuerte, dilo con claridad, los inmigrantes son bienvenidos aquí”, era un canto recurrente, mientras la gente hacía gestos de señales y aplaudía mientras los coches y los camiones esporádicamente tocaban sus cuernos en apoyo.

Steven McCasland, de Queens, Nueva York, estaba sosteniendo un letrero que decía: “Este pueblo no quiere que su idiota vuelva”.

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“Es una vergüenza para esta ciudad”, dijo McCasland de Trump.

“Somos una ciudad de gente compasiva y ciertamente él no es uno de ellos”.

McCasland, de 30 años, dijo que se sintió inspirado a asistir a la protesta después de ver a Trump firmar una orden ejecutiva el jueves por la mañana, que permitirá a las iglesias respaldar a los candidatos políticos; una medida que algunos han criticado como una amenaza para la separación de la iglesia y el estado.

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“Como un hombre gay estoy preocupado por la aprobación de estos proyectos de ley”, dijo McCasland. “Pero también estoy preocupado por Roe v Wade, la salud de la mujer y los derechos de los inmigrantes”.

Alrededor de 1,000 personas marcharon hacia el Intrepid siendo finalmente detenidas a una cuadra al norte de la nave. Se habían encontrado en el parque DeWitt en el centro de Manhattan, y la proximidad de la protesta a una serie de logros de Trump no se han perdido en el presidente.

El parque DeWitt está a una milla al oeste de Trump Tower ya sólo unas pocas cuadras del Trump International Hotel and Tower. Está a menos de una milla al sur del antiguo Trump Place, un grupo de edificios de apartamentos donde los residentes solicitaron con éxito que se retirara el nombre de Trump en noviembre.

“No ha hecho nada bien”, dijo Janet Doud, de 59 años. “Está destrozando nuestro mundo, nuestro país, nuestro planeta. En todo sentido.”

Con información de The Guardian