Rex Tillerson ha tratado de calmar los nervios tras un intercambio de retórica agresiva entre Donald Trump y el régimen norcoreano, insistiendo en que no hay “amenaza inminente de guerra” y que los estadounidenses “pueden dormir bien por la noche”.
El secretario de Estado estadounidense conversó con periodistas en el camino de regreso a Washington después de una gira por Asia horas después de que Trump amenazara con ahogar a Corea del Norte con “fuego y furia como el mundo nunca había visto” y Pyongyang respondiendo diciendo que estaba ” Examinar “un plan para llevar a cabo un ataque de misiles en Guam y crear un” fuego envolvente “alrededor del territorio estadounidense en el Pacífico, a 3,400 kilómetros de la península de Corea.
El avión de Tillerson debía detenerse en Guam, que alberga una base militar estadounidense que incluye un escuadrón submarino, una base aérea y un grupo de guardacostas, y el secretario de Estado dijo que no tenía planes de cambiar su ruta.
“Nada de lo que he visto y nada de lo que conozco indicaría que la situación ha cambiado drásticamente en las últimas 24 horas”, dijo Tillerson.
Tillerson defendió a Trump sobre su lenguaje belicoso, que sorprendió a los aliados estadounidenses y ha sido duramente criticado en Estados Unidos y en todo el mundo como imprudente.
“Lo que el presidente está haciendo es enviar un mensaje fuerte a Corea del Norte en un lenguaje que Kim Jong-un pueda entender, porque no parece entender el lenguaje diplomático”, dijo Tillerson. “Creo que el presidente sólo quería ser claro con el régimen de Corea del Norte sobre la capacidad indiscutible de EEUU para defenderse; se defenderá a sí mismo y a sus aliados”.
Mientras Tillerson estaba en el aire, Trump publicó en Twitter a las 8 am en Washington. Su tono no era tan acalorado como las amenazas de guerra que emitió el martes desde su campo de golf de Nueva Jersey, pero explotó explícitamente las armas nucleares de su país de una manera que sus predecesores generalmente habían evitado.
“Mi primera orden como Presidente fue renovar y modernizar nuestro arsenal nuclear. Ahora es mucho más fuerte y más poderoso que nunca “, Trump twitteó. “Esperemos que nunca tengamos que usar este poder, pero nunca habrá un momento en que no seamos la nación más poderosa del mundo!”
De hecho, fue Barack Obama quien aprobó la importante reforma y modernización del arsenal estadounidense, que es considerablemente más pequeño de lo que era en plena guerra fría, a raíz de una sucesión de tratados de control de armas. Los EEUU y Rusia están ahora en una paridad aproximada. Estados Unidos tiene 6.800 cabezas nucleares, mientras que Rusia tiene 7,000.
Con información de The Guardian
