MÉRIDA, Yuc. (apro).- El expresidente del Colegio de Psiquiatras de Yucatán, Luis Enrique Lara González, fue declarado prófugo de la justicia luego de que no se presentara a la audiencia que se le programó hoy en el Tribunal Segundo de Juicio Oral para imponerle la pena como coautor del homicidio de su colega Felipe de Jesús Triay Peniche.
Ahí mismo se giró una orden de aprehensión en su contra.
Lara González fue enjuiciado junto con el también psiquiatra Pablo Santos García Gutiérrez como probables autores intelectual y material, respectivamente, del homicidio calificado de su colega, perpetrado en agosto de 2014.
La víctima fue desmembrada y sus restos –que conservaron cinco días en congelación en el departamento que habitaba García Gutiérrez– fueron hallados en el interior de su camioneta, la cual abandonaron en el estacionamiento de un supermercado.
Al momento del crimen, Lara fungía como presidente del Colegio de Psiquiatras de Yucatán y García Gutiérrez como responsable del área de Psiquiatría de la clínica T1 del IMSS.
El pasado 16 de septiembre, el Tribunal Segundo de Juicio Oral condenó a García Gutiérrez a 35 años de prisión por el homicidio de Triay Peniche, a cuyos deudos deberá pagar 35 millones 663 mil 426.20 pesos por concepto de indemnización a víctimas indirectas.
Sin embargo, por “una duda razonable” en las evidencias incriminatorias que presentó en el juicio la Fiscalía General del Estado (FGE), el Tribunal absolvió a Lara González y ordenó su liberación.
El viernes 16, la Primera Sala Colegiada del Sistema de Justicia Penal Acusatorio del Tribunal Superior de Justicia de Yucatán, erigida en Tribunal de Casación, abrió una nueva etapa en el juicio que se sigue a los psiquiatras Pablo Santos García y Enrique Lara González por el asesinato de Triay Peniche.
El 19 de diciembre, el Tribunal de Casación determinó la corresponsabilidad de Lara González en el asesinato de Triay Peniche, reconoció su culpabilidad, revocó su sentencia absolutoria y regresó el caso al Tribunal Segundo de Juicio Oral para la individualización de su pena.
El 24 de diciembre, familiares de la víctima se inconformaron con la decisión, debido a que hasta ese momento la autoridad judicial no había emitido la orden de aprehensión contra el médico prófugo e insinuaron que se le dejó escapar. Asimismo, sus abogados dijeron que tramitaban una orden de protección para los deudos, pues Lara “ya mató una vez y puede volverlo a hacer”.
Llegado el momento de la audiencia, las sospechas de que no se presentaría a encarar su sentencia se cumplieron. Lara fue declarado esta tarde sustraído de la acción de la justicia y hasta entonces se giró la orden para detenerlo.
