Las rayas son omnipresentes en la vida moderna, desde camisas y códigos de barras, hasta persianas venecianas y cruces peatonales
Científicos de los Países Bajos y Estados Unidos han descubierto que para algunas personas, simplemente observar las rayas verticales, ya sea en una imagen estática o en la vida real, puede desencadenar un cortocircuito neuronal de actividad en el cerebro.
En casos severos puede conducir a la epilepsia, pero los investigadores creen que también podría ser responsable de las migrañas.
Alrededor de uno de cada siete personas sufren migrañas y la causa a menudo se desconoce. Pero los autores del estudio creen que las rayas en la ropa, los edificios o las obras de arte públicas podrían desencadenar dolores de cabeza incapacitantes, particularmente en las personas que ya son sensibles a la luz.
Sugieren terrazas, radiadores, escaleras mecánicas, ladrillos repetitivos e incluso las rayas en los toldos o tumbonas podrían desencadenar ataques, o simplemente una vaga sensación de malestar.
Un cortocircuito diseñado
“Nuestros resultados implican que en el diseño de edificios, puede ser importante evitar los tipos de patrones visuales que pueden activar este cortocircuito y causar incomodidad, migrañas o convulsiones”, dijo la Dra. Dora Hermes del Centro Médico Universitario (UMC) Utrecht en los Países Bajos.
“Incluso las personas perfectamente sanas pueden sentir un malestar moderado por las imágenes que son más propensas a desencadenar convulsiones en la epilepsia fotosensible”.
Es la primera vez que los científicos han descubierto que ciertas imágenes fijas pueden tener un impacto similar.
Después de una extensa revisión de la literatura científica hasta la fecha, los investigadores piensan que la razón por la que las rayas afectan al cuerpo es que desencadenan un patrón repetitivo particular de actividad neuronal en el cerebro conocido como oscilaciones gamma.
Con información de The Telegraph
