Los fallos en los frenos de mano podrían afectar a los vehículos de Tesla fabricados entre febrero y octubre de 2016
Tesla está retirando voluntariamente 53,000 de sus coches eléctricos modelo S y modelo X después de que una avería fuese encontrada con uno de los sistemas de frenado usados en ambos vehículos.
El retiro afecta a los automóviles vendidos en todo el mundo, construidos a partir de febrero y octubre de 2016. La falla puede provocar que el freno de estacionamiento se bloquee e impida que los vehículos se muevan. Tesla dice que mientras que quiere inspeccionar a todos, menos del 5% de los coches retirados pueden verse afectados.
Elon Musk, el dueño del fabricante de automóviles eléctricos se disculpó por la cuestión, que culpó a un pequeño error en el equipo proporcionado por un proveedor. Un portavoz de Tesla dijo en un comunicado: “No ha habido informes de que el sistema de frenos de mano no pueda sostener un vehículo estacionado o no detener un vehículo en una emergencia como resultado de esta condición, y esta parte no tiene ningún impacto en los sistemas de frenado regulares.
“No creemos que esta cuestión pueda llevar a una preocupación de seguridad para nuestros clientes, y no hemos visto un solo accidente o lesión en relación con él”.
Una práctica común
Los propietarios de Tesla afectados por el problema serán notificados por sus coches de que el freno de mano necesita servicio. El fabricante de automóviles eléctricos, que ha vendido más de 200,000 vehículos, dijo que se pondría en contacto con los propietarios por correo. La reparación debe tomar menos de 45 minutos por vehículo y se espera que las piezas de repuesto suficientes para todos los vehículos afectados estén disponibles en octubre.
El fabricante de vehículos eléctricos produjo 83,922 vehículos en 2016, con ventas en expansión con la popularidad de sus modelos de sedán y SUV.
Revisiones en el mercado de automóviles son comunes, y Tesla no es ajeno a la práctica. En abril de 2016, Tesla retiró 2,700 automóviles modelo X en los EEUU debido a una bisagra de bloqueo defectuoso en los asientos de tercera fila, habiendo comenzado las entregas del SUV de lujo en septiembre de 2015. La empresa se vio obligado a retirar toda su flota Model S, 90,000 vehículos, en noviembre de 2015 debido a un cinturón de seguridad defectuoso.
En marzo, Mercedes se vio obligada a retirar alrededor de un millón de vehículos en todo el mundo, incluyendo 75.000 en el Reino Unido, por un riesgo de incendio con algunos componentes de arranque en los coches fabricados entre 2015 y 2017.
Con información de The Guardian
