Tomas clandestinas de combustible pasó de 400 a seis mil 200 litros, afirma diputado

Rodrigo Abdalá, diputado federal por el estado de Puebla, ha afirmado que las tomas clandestinas a oleoductos ha aumentado exponencialmente.

CIUDAD DE MÉXICO, México.-  El diputado federal de Puebla, Rodrigo Abdalá, afirmó que desde que llegó el PAN al gobierno, las tomas clandestinas en oleoductos aumentaron en el llamado “triángulo rojo de Puebla”.

Abdalá, miembro de Morena afirmó también que “Fox no cumplió” con utilizar la tecnología para detectar y prevenir el robo de hidrocarburos, a pesar de que en 2005, durante su presidencia, se detectaron 400 tomas clandestinas. Ese mismo año el Congreso pasó en la Ley de Ingresos de ese año un rubro para que se realizaran inversiones para frenar esa lacra.

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Por su parte, agregó, “Felipe Calderón fue advertido por el Grupo Directivo del Sistema de Gestión por Procesos de Pemex de la necesidad de programar inversiones específicas en tecnología para inhibir y prevenir el robo de combustible, justo en el momento en que el país contaba con el mayor monto de ingresos petroleros de su historia y cuando las tomas clandestinas no eran más de 400 en todo el país”.

Puebla, la principal víctima

Según el diputado federal, a día de hoy el número de tomas asciende a seis mil 200 en país, pero Puebla concentra el 60%. El legislador dijo que de haber atendido las demandas del Grupo Directivo del Sistema de Gestión por Procesos de Pemex, hubiera disminuido esa cifra.

Agregó que el gobierno, en lugar de invertir en tecnología para atacar parte del problema, recurrió a la intervención de dos mil 500 efectivos militares adicionales. Y consideró que “permitir su irrupción al interior de las comunidades es un acto de enorme gravedad y torpeza que responde a la desesperación, pero no a una estrategia planificada de combate al crimen”.

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De acuerdo con Rodrigo Abdalá, en caso de ser real el video difundido por el diario Cambio de la entidad, en el que se observa que un soldado da el “tiro de gracia” a un presunto delincuente huachicolero, muestra que los casos de Tlataya en el Estado de México o de Tanhuato en Michoacán, “se están replicando por la presencia del Ejército”.

Con información de Proceso

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