Donald Trump mantuvo sus amenazas an Corea del Norte el viernes con un tweet matutino alegando que las opciones militares de EEUU fueron “preparadas y cargadas” para su uso si Pyongyang “actúa imprudentemente”.
No hubo cambios en los despliegues estadounidenses en la región ni un cambio en el estado de alerta de las fuerzas estadounidenses.
En declaraciones a periodistas, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, dijo que un conflicto en la península coreana sería “catastrófico” y enfatizó que los diplomáticos estadounidenses deben tomar la iniciativa para resolver la crisis. Mattis apuntó a una votación del Consejo de Seguridad de la ONU el fin de semana para más sanciones contra Corea del Norte como una señal de que la diplomacia estaba progresando.
Sin embargo, el nuevo tweet enviado por Trump a las 7.30 de su campo de golf en Bedminster, Nueva Jersey, puso el énfasis en el uso de la fuerza.
El presidente retweeteó entonces que el comando del Pacífico de los EEUU había fijado las imágenes de bombarderos pesados de B-1B Lancer en ejercicios sobre el Pacífico con las fuerzas aéreas japonesas y surcoreanas el 7 de agosto, acompañado por el texto que decía los planos estaban listos para entrar “en combate de esta noche” misión de las fuerzas estadounidenses en Corea del Sur, “si se le pide que lo haga”.
Mensajes de Trump continuaron una guerra de palabras entre el presidente y Corea del Norte que encendió el martes cuando el presidente de Estados Unidos, tras los informes de un gran avance en el programa de armas de Corea del Norte, amenazaba con desatar “fuego y furia como el mundo nunca ha visto” en Corea del Norte si El régimen siguió amenazando a Estados Unidos.
El gobierno de Kim Jong-un respondió al día siguiente ridiculizando las declaraciones de Trump como “un montón de tonterías” y publicando planes detallados para lanzar misiles para aterrizar en las aguas alrededor del territorio del Pacífico de los Estados Unidos de Guam.
Preguntado sobre el potencial de enfrentamiento militar, Mattis dijo a periodistas que era su responsabilidad preparar “opciones militares si fueran necesarias”.
Pero advirtió: “La tragedia de la guerra es bastante conocida, no necesita otra caracterización, más allá del hecho de que sería catastrófica “.
Con información de The Guardian
