Donald Trump ha reanudado su ofensiva contra Irán, exigiendo que Teherán deje inmediatamente su apoyo financiero y militar a “terroristas y milicias” y reiterando que nunca se debe permitir que posea armas nucleares.
En lo que ha sido su mensaje clave de política exterior en la primera gira internacional del presidente de Estados Unidos desde que asumió el poder, volvió a afirmar repetidamente la necesidad de una acción internacional después de su llegada a Israel.
“Estados Unidos e Israel pueden declarar con una sola voz que nunca se debe permitir que Irán posea un arma nuclear – nunca, nunca – y debe cesar su mortífero financiamiento, capacitación y equipamiento de terroristas y milicias, y debe cesar inmediatamente”, dijo Trump en declaraciones públicas tras una reunión en Jerusalén con el presidente israelí, Reuven Rivlin.
Trump añadió que también había detectado “una creciente comprensión entre sus vecinos árabes de que tienen una causa común con ustedes en la amenaza que plantea Irán”.
Los recientes comentarios de Trump -que se hacen eco de comentarios similares en su discurso de Riad el domingo- provocaron una respuesta del presidente iraní, Hassan Rouhani, al insistir el lunes en que la estabilidad no podría lograrse en Oriente Medio sin la ayuda de Teherán.
“¿Quién puede decir que la estabilidad regional puede ser restaurada sin Irán? ¿Quién puede decir que la región experimentará estabilidad total sin Irán? “, Agregó Rouhani.
En su primera conferencia de prensa desde su victoria aplastante en la votación presidencial del viernes, el clérigo iraní moderado descartó la cumbre que Trump asistió el fin de semana en Arabia Saudita como un “evento ceremonial” que no tiene valor político y no dará resultados.
Los últimos comentarios siguen las declaraciones de Trump en Riad el domingo. Dijo: “Desde Líbano a Irak hasta Yemen, Irán financia, arma y entrena a terroristas, milicias y otros grupos extremistas que generan destrucción y caos en toda la región”.
El análisis de Trump – esencialmente dependiendo de la vieja consideró que el enemigo de mi enemigo es mi amigo – no ha sido, sin embargo, justificado por la historia reciente en la región, donde Israel y la minoría compartida de los sunitas por Irán no se han equiparado a un común porque.
Con información de The Guardian
