Un fracaso olímpico

El pobre desempeño de los atletas mexicanos en las Olimpiadas de Río pone en evidencia, una vez más, la incapacidad de Enrique Peña Nieto para gobernar y la urgencia de que alguien ponga orden en este país.

La opinión pública se ha mostrado ofendida con la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, CONADE, no sólo por los 18 mil millones de pesos ejercidos del 2013 a la fecha, sino por el mal uso de ese recurso y porque al frente de la misma se encuentra un individuo por el sólo hecho de ser amigo del presidente.

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De entrada, la imposición de Alfredo Castillo Cervantes como director de la CONADE por parte de Peña Nieto, originó un rompimiento de la dependencia con casi todas las federaciones deportivas debido a su soberbia y al desconocimiento del medio.

Las 27 federaciones fueron objeto de represión y represalias por parte de Castillo Cervantes. Sin fundamento legal, a algunas les recortó drásticamente su presupuesto y al resto de plano se los retiró completamente, no obstante ser un año clave para la clasificación olímpica.

Como consecuencia, la delegación mexicana compuesta por 126 atletas de 27 disciplinas, apenas pudo cosechar cinco medallas para colocarse en el lugar 61 de los países participantes. Un resultado lamentable, incluso si se le compara con las últimas dos olimpiadas donde México se había colocado en una posición más decorosa.

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No había terminado la justa olímpica y ya los mismos deportistas estaban comenzado el linchamiento de Castillo Cervantes. Lo acusan de convertir a la CONADE en una agencia de viajes; de utilizar los recursos para pasear a la novia y a los amigos en vez de comprar uniformes a los atletas o apoyarlos con preparadores físicos y terapeutas.

Castillo Cervantes, ciertamente, no tiene nada que estar haciendo al frente de un organismo encargado de promover el deporte.

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Desde que su amigo Enrique Peña Nieto asumió la presidencia, Alfredo Castillo ha ocupado cuatro cargos completamente distintos dentro de la administración pública, por los cuales ha cobrado hasta la fecha 10 millones de pesos.

Al inicio de la presente administración, fue designado por Peña Nieto como subprocurador General de la República, luego como titular de la Procuraduría Federal del Consumidor; siete meses después Comisionado de Pacificación de Michoacán y finalmente director general de la CONADE donde ha cobrado un salario de tres millones de pesos durante los últimos 15 meses.

¿Cómo podríamos obtener mejores resultados en las olimpiadas si ese es el perfil de quien se ostenta como el máximo promotor del deporte en