La Selección Mexicana ya viajó a Trinidad y Tobago, donde este lunes por la tarde harán el reconocimiento de cancha, escenario que se le ha como complicado al Tricolor.
El juego se desarrollará en el estadio Hasely Crawford, en el corazón de la ciudad, que siempre se complica para todos los rivales, pero para México, un poco más. No conoce la victoria en sus últimas tres visitas.
Juan Carlos Osorio, director técnico del Tricolor va confiado en que en esta ocasión la historia será diferente para el equipo.
Las eliminatorias de los mundiales Corea-Japón 2002, Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, fueron siempre de peligro para el Tri.
El Hasely Crawford tiene una capacidad para 27 mil personas, rebasado por la tecnología y la comodidad de los nuevos estadios. Luce descuidado, pero con una cancha en buen estado.
En el 2002 la visita de México fue un empate 1-1. Para el 2006 en la era de Lavolpe se perdió 2-1 y para Sudáfrica 2010 se empató a dos goles.
Visita complicada del Tri a Trinidad y Tobago
