Los trabajadores de rescate indios han renovado sus esfuerzos para llegar a 15 mineros de carbón atrapados bajo tierra durante 13 días mientras las familias oraban por su regreso seguro.
Pero las esperanzas de encontrarlos con vida parecían escasas el miércoles después de que las aguas de la inundación se precipitaran a través del hoyo de “hoyo de ratas” ilegal.
El grupo comenzó a trabajar en la mina en el estado nororiental de Meghalaya el 13 de diciembre y ha estado bajo tierra desde entonces.
“Solo la gracia de Dios y algún milagro pueden ayudarles a estar vivos”, dijo a Reuters Kyrmen Shylla, ministra de gestión de desastres de Meghalaya, desde la capital del estado, Shillong.
La operación para rescatar a los mineros del pozo de 100 m de profundidad en Ksan se suspendió el domingo luego de inundaciones repentinas de un río cercano, dijeron las autoridades.
Un equipo de unos 100 expertos de la Fuerza Nacional de Respuesta ante Desastres (NDRF, por sus siglas en inglés) ha estado acampando en el sitio de la mina, pero sus operaciones se han visto obstaculizadas por la falta de equipo sofisticado, dijo SK Shastri, comandante de la NDRF que dirige las operaciones.
“El nivel del agua no ha bajado una pulgada, aumentó después de llover”, dijo Shastri. “Las dos bombas de 25 caballos de fuerza fueron ineficaces. Necesitamos hasta 12 bombas de 100 caballos de fuerza para drenar el agua “.
La minería fue prohibida en el estado rico en minerales por un tribunal federal en 2014 después de que las comunidades locales dijeron que estaba contaminando los cuerpos de agua.
Pero la práctica continúa con los lugareños que extraen ilegalmente carbón usando minas peligrosas de “agujeros de ratas”. Esto implica cavar en el lado de las colinas y luego excavar túneles horizontales para alcanzar una veta de carbón.
Los trabajadores, incluidos los niños, descienden cientos de pies en escaleras de bambú para extraer el carbón, lo que a menudo conduce a accidentes en tales minas.
Al menos 15 mineros murieron después de que quedaron atrapados en otra mina de ratas inundada en Meghalaya en 2012. Sus cuerpos nunca fueron recuperados.
