Hasta 40 países han dicho que no reconocerían a la nueva asamblea, que según los críticos es un intento poco velado por Nicolás Maduro de consolidar el poder. El cuerpo tendrá la capacidad de disolver las instituciones estatales y reescribir la constitución.
La oposición de Venezuela anunció planes para bloquear la inauguración de una asamblea constituyente contenciosa, cuyas elecciones fueron aún más nubladas el miércoles por nuevas acusaciones de fraude electoral.
La coalición de la oposición pidió protestas masivas “contra la instalación del fraude constitutivo” para impedir que la nueva asamblea – compuesta enteramente por el partido socialista gobernante y sus aliados políticos – comience sus sesiones el jueves.
Maduro ha dicho que su objetivo es llevar la paz a un país agudamente dividido atrapado en crisis política y crisis económica.
Pero el presidente y sus aliados más cercanos también han prometido usar la asamblea para encarcelar a líderes claves de la oposición, retirar a su principal fiscal de su cargo y despojar a los legisladores de oposición de su inmunidad constitucional.
“La asamblea constituyente es el cambio para que este país pueda recuperar el orden. La anarquía ha terminado aquí “, dijo Cilia Flores, la esposa de Maduro al recibir su acreditación como miembro de la asamblea. “La justicia vendrá a partir de mañana”, dijo.
Las nuevas dudas fueron sobre la participación oficial en el voto de la asamblea, después de que la empresa que provee la plataforma tecnológica para el sistema de votación de Venezuela dijo el miércoles que la afirmación del gobierno de que más de 8 millones de personas votaron el domingo estaban equivocadas.
“Sabemos, sin ninguna duda, que la participación de la reciente elección para una asamblea constituyente nacional fue manipulada”, dijo en Londres el presidente ejecutivo de Smartmatic, Antonio Mugica.
Mugica dijo que Smartmatic detectó la exagerada participación debido al sistema de elecciones automatizado de Venezuela. “Estimamos que la diferencia entre la participación real y la anunciada por las autoridades es de al menos 1 millón de votos”, dijo.
El presidente del consejo electoral, Tibisay Lucena, puso la participación en el 41,53%, o 8.089.320 personas. La oposición puso el número entre 2 millones y 3 millones.
Sólo 3.7 millones de personas votaron a las 5.30 de la tarde en las elecciones de la Asamblea Constituyente, según datos del Consejo Electoral Interno revisados por Reuters, lo que arroja dudas sobre los 8.1 millones de personas que las autoridades dijeron que votaron ese día. La votación duró hasta las 7pm.
Mientras tanto, la presión internacional sobre Maduro como su país y su gobierno se hizo cada vez más aislada, después de que dos de los principales opositores políticos bajo arresto domiciliario fueran arrastrados de sus hogares en las redadas de medianoche.
La UE desafió los llamamientos a las sanciones contra el presidente de Venezuela después de que el primer ministro español, Mariano Rajoy, propusiera a los países miembros bloquear los viajes de cualquier persona vinculada al gobierno de Maduro. Sin embargo, el bloque advirtió que estaba listo para actuar si hubiera alguna dilución adicional de las instituciones democráticas del país.
Federica Mogherini, alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, dijo en una declaración que los países de la Unión no reconocerían a la nueva asamblea constituyente debido a “las preocupaciones sobre su representatividad y legitimidad efectivas”. Sin embargo, fracasó en responder a las llamadas del presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, por sanciones dirigidas contra Maduro.
Con información de The Guardian
