TIJUANA, Baja California.- El caso de Viviana Elizabeth Aguirre Estrada, joven de 23 años desaparecida desde el 5 de diciembre de 2024 en Tijuana, ha sido tomado con una alarmante indiferencia por parte de las autoridades, pese a que la Fiscalía General del Estado (FGE) tiene certeza de que se trata de un secuestro vinculado a una red de tráfico de personas.
Viviana fue vista por última vez cuando abordó un taxi libre rumbo al fraccionamiento Natura. Su familia recibió una videollamada en la que los responsables exigían 10 mil dólares por su liberación. A pesar de que el dinero fue entregado, la joven nunca volvió. El caso, lejos de esclarecerse, sigue estancado.
La fiscal María Elena Andrade Ramírez afirmó que trabajan en conjunto con autoridades de Estados Unidos, aunque no reveló detalles. Mientras tanto, colectivos denuncian que este tipo de crímenes se están normalizando y no se les da la urgencia que merecen, a pesar de su gravedad.
El Colectivo de Búsqueda de Baja California realizó una exploración en Las Delicias III tras una llamada anónima que aseguraba que Viviana había sido asesinada. Aunque se hallaron restos humanos, todos correspondían a hombres. De Viviana, hasta hoy, no hay rastro alguno.
