Morena privilegia las iniciativas propuestas por sus diputados mientras que arrumba las de aquellos representantes emanados de otros partidos
El pasado 8 de mayo el diputado Adrián Humberto Valle Ballesteros propuso una iniciativa que modificaría el artículo 224 del Código Penal de Baja California para que el delito de extorsión sea perseguido de oficio y no por querella, es decir solo si el ciudadano interpone la correspondiente denuncia ante el Ministerio Público.
El legislador emanado del Partido Revolucionario Institucional sostuvo que su propuesta, elaborada el 30 de abril, no surge de una mera reflexión legislativa, sino de la solicitud directa de empresarios, comerciantes y emprendedores de diversos sectores productivos en la entidad.
Sin embargo, el grupo de Whatsapp del Congreso del Estado mediante el cual informan de las iniciativas de ley a los medios de comunicación, nos informó que apenas el 14 de agosto la diputada María Teresa Méndez propuso que el delito de extorsión sea perseguido de oficio, para lo cual pide la modificación al artículo 224 del mismo código penal.
Esto tiene dos lecturas: una, que los asesores de la legisladora son inexpertos e incapaces siquiera de leer que entre las iniciativas presentadas al Congreso ya había una que buscaba sancionar precisamente el mismo delito.
Y dos, que el partido Morena privilegia las iniciativas propuestas por sus diputados mientras que arrumba las de aquellos representantes emanados de otros partidos, como si estos no tuvieran derecho a legislar, pero sobre todo, que su trabajo es desechado pese a que le cuesta al ciudadano.
Lo anterior no es nuevo pues ya sabemos de los casos de plagios de tesis y hasta de planes de trabajo en diversas secretarías.
Ahora, esperamos un poco de decoro en el Congreso de Baja California para que tome cartas en el asunto y ponga a sus diputados a hacer la tarea y por lo menos leer las iniciativas previamente presentadas, para no quedar como los copiones del salón.
