Los miembros del albergue Casa Migrante señalaron que estos hechos se dan principalmente con la Guardia Nacional, INM y la Policía Municipal.
TIJUANA, Baja California.- Desde agresiones verbales hasta físicas, los activistas y defensores de los derechos de los migrantes realizaron una conferencia de prensa para denunciar los abusos de autoridad cometidos por elementos de la Guardia Nacional, el Instituto Nacional de Migración, la Policía Municipal y otras autoridades contra los indocumentados y las personas en condición de calle.
De acuerdo con Jessie Valsin, representante de la comunidad haitiana, los uniformados han llegado a patear a las personas mientras duermen con la excusa de que son bolsas de basura.
“Una forma para no tocar a las personas, los patean. Hemos sido testigos de que se acercan a la comunidad y los patean con la excusa de que es basura, con la excusa de que la comunidad en condición de calle y migrante son flojos porque no quieren trabajar, es lo que nos dice la gente”, expresó.
La activista dio a conocer la experiencia que le compartió una migrante haitiana, quien, acompañada de dos menores, fue llevada a uno de los centros de resguardo del Instituto Nacional de Migración. Sin embargo, tanto el camino como su estadía en el lugar, fueron un martirio.
“Llegaron dos unidades de INM y otros carros de la Guardia Nacional, nos quitaron todos nuestros pasaportes comentando que no teníamos permiso para caminar solo con el pasaporte. Me estresé porque llevaba dos menores, no me sentía segura en el camino porque el conductor manejaba con exceso de velocidad, pensé que nos iba a matar, y como esa mañana no había desayunado, al manejar así, terminé vomitando y me desmayé”, relató.
Vivianne Petit Frere, activista defensora de los derechos de los haitianos, compartió un fragmento de un escrito que le envió una persona de su misma nacionalidad, donde relata cómo él, junto con un grupo de migrantes, fueron arrestados por elementos de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración, todo esto sin recibir una explicación, además les pidieron documentos que no suelen tener a la mano debido a las dificultades que implica tramitarlos.
“Me detuve para ayudar a un grupo que quería sacar su cita en CBP ONE, pasó un grupo de policías, se paró, nos preguntaron qué estábamos haciendo, les explicamos y sin dudar, le hablaron a otros policías y carros de INM, nos hicieron subir y nos llevaron sin saber por qué. Cuando llegamos a la cárcel, nos maltrataron mucho y nos hicieron firmar varios papeles que ni sabemos qué son”, contaron.
Los directivos y activistas del albergue Espacio Migrante exigen a las autoridades de los tres niveles de gobierno que atiendan la situación, y no permitan que los abusos contra las personas en condición de movilidad continúen ocurriendo en una de las fronteras más importantes del mundo.
Con información de Alan Ramírez
