TIJUANA, B.C.- Los niños son quienes más frecuentemente sufren de lesiones que pueden conducirlos a una fractura de algún hueso. Las diferencias entre niños y adultos son anatómicas, biomecánicas y fisiológicas. En la mayoría de los casos las lesiones en los niños son de radio, cúbito y antebrazo, seguido de tibia, codo, muñeca y brazo.
De acuerdo a los especialistas, las fracturas se registran principalmente en niños de 11 años de edad, pero no se descarta la posibilidad de sufrir fracturas durante el crecimiento y hasta alcanzar la edad adulta.
Se consideran los 11 años, la edad en que los accidentes son más frecuentes, generalmente a causa de la práctica de deportes por lo que estas ocurren en las unidades deportivas y centros recreativos.
Hay diversos tipos de fracturas, entre las más comunes destacan las que son las cerradas que requieren inmobilización con un yeso y las expuestas que requieren de una intervención de cirugía. También hay lesiones diversas que no provocan fracturas y se les conoce como esguince o luxación.
La única manera de prevención de lesiones en los menores de edad, es el realizar actividades deportivas, el fomento del consumo frecuente de alimentos que contengan calcio en su constitución.
Con información de Ivonne Hernández