TIJUANA, Baja California. – “Tal parece que no les importó la muerte de mi hija”, expresó la señora Cecilia Flores, madre de la niña Adriana Cano Flores, de siete años, fallecida recientemente.
La madre manifestó junto a otros 20 padres de familia frente a las instalaciones del DIF Estatal para exigir a las autoridades que respondan por la negligencia y malos tratos que sufrieron sus hijos en las instalaciones de su albergue.
La madre de la menor señaló que hasta después de ocho días de anunciado el fallecimiento, pudo tener acceso al cuerpo de su hija. Sin embargo, indicó que su estado físico no coincidía con el resultado de la necropsia efectuada por el DIF, la cual indica que el deceso ocurrió por ahogamiento.
“Estas personas querían tomarse el atrevimiento de cremar a mi niña sin permiso y pues no se me hacía justo, traté y traté gracias a los abogados para que me permitieran que tuviera el cuerpo de mi niña para darle cristiana sepultura. Cuando la miré en el féretro, tenía el labio fisurado, roto, tenía en sus manitas unas marcas como si le hubieran pegado con una vara, por eso estoy inconforme con la necropsia”, declaró.
A Cecilia Flores aún falta que le entreguen a tres de sus hijos, quienes trasladados la casa hogar La Esperanza.
Sin embargo, aún tiene que obtener un comprobante de escuela para padres para que las autoridades le permitan recuperar la custodia de sus hijos.
Por su parte, el abogado Walter Jiménez, quien llevó el caso en materia de amparo en colaboración con el asesor jurídico Carlos de la O, señaló que la demanda se está llevando conforme a las instrucciones del juez.
Aunque fue solo a partir de presentado el caso que se comenzó a tener conocimiento del estado de los menores.
“Estaba en una primera casa hogar y en la primera casa hogar se negaban a que la mamá pudiera a convivir con los niños, se amplió una demanda de amparo para que la mamá pudiera convivir y el juez otorgó una suspensión. La primera casa hogar se oponía porque decía que tenía que seguir indicaciones del DIF Estatal Tijuana, no les importaba que era orden de juez federal. ‘Es que no puedo permitirles’, decía. Siempre se tenía que estar hablando con la señora”, comentó.
El representante legal indicó que la señora Cecilia Flores no pudo tener ningún contacto con sus hijos desde febrero en que le fueron sustraídos, hasta el pasado mayo.
Otros padres de familia señalaron que sus hijos son mantenidos en condiciones deplorables dentro del albergue, en que al menos 20 niños desde los seis hasta los 17 años de edad, son mantenidos en un mismo espacio reducido.
La menor Nohemi Rentería, quien asistió a la manifestación junto a su tío Jorge Valverde, narró las condiciones a las que fue sometida.
“Me dieron ropa usada y de ahí me mandaron con las niñas, revueltas niñas y pequeñas. Cuando llegué todo fue mal, se peleaban, había discapacitadas y poca higiene, los baños no tenían cortinas, todas nos bañábamos juntas”, recordó.
Durante las dos horas en que duró las manifestación frente a las instalaciones del DIF Estatal, ninguna autoridad se presentó al lugar y la única indicación de los funcionarios es que la señora Cecilia Flores debe entregar una prueba psicológica para recuperar la custodia de sus tres hijos restantes.
Con información de Andrés Barba.
