Más de 820 millones de personas en todo el mundo siguen viviendo con desnutrición, según un informe de la ONU que dice que alcanzar el objetivo de cero hambre para 2030 es “un desafío inmenso”.
La cantidad de personas que no tienen suficiente comida ha aumentado por tercer año consecutivo a medida que aumenta la población, después de una década en que se logró un progreso real. La tendencia subyacente es la estabilización, cuando las agencias globales esperaban que cayera.
Millones de niños no están recibiendo la nutrición que necesitan. La ONU dice que el ritmo del progreso para reducir a la mitad el retraso en el crecimiento de los niños y la reducción del número de bebés con bajo peso al nacer es demasiado lento, lo que pone en peligro las posibilidades de alcanzar otro de los objetivos de desarrollo sostenible.
El informe proviene de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el Programa Mundial de Alimentos y la Organización Mundial de la Salud.
Si bien el hambre sigue siendo generalizada, la obesidad, también relacionada con la desnutrición, sigue aumentando en todas las regiones. Hay 338 millones de niños en edad escolar y adolescentes con sobrepeso y 672 millones de adultos obesos. Asia y África, que tienen nueve de cada 10 niños con retraso en el crecimiento y más de nueve de cada 10 niños desperdiciados en todo el mundo, también albergan a casi tres cuartos de todos los niños con sobrepeso en todo el mundo, en gran parte impulsados por dietas poco saludables.
Uno de cada siete bebés en todo el mundo nacieron con bajo peso al nacer en 2015, según el informe, muchos de ellos de madres adolescentes. Eso los pone en riesgo de desarrollo pobre.
La población mundial ha crecido de manera constante, y la mayoría de las personas vive en áreas urbanas. La tecnología ha “evolucionado a un ritmo vertiginoso, mientras que la economía se ha vuelto cada vez más interconectada y globalizada”, dicen los jefes de las agencias de la ONU en un prólogo al informe.
“Muchos países, sin embargo, no han sido testigos de un crecimiento sostenido como parte de esta nueva economía. La economía mundial en su conjunto no está creciendo tanto como se esperaba “.
El desglose climático está afectando a la agricultura y el número de agricultores ha disminuido. “Todo esto ha llevado a cambios importantes en la forma en que los alimentos se producen, distribuyen y consumen en todo el mundo, y a nuevos desafíos de seguridad alimentaria, nutrición y salud”.
El hambre está aumentando en los países donde el crecimiento económico se está retrasando y hay desigualdad de ingresos.
Con información de The Guardian
