Aclaró que la reciente “pausa diplomática” anunciada no implica un deterioro en las relaciones bilaterales con los gobiernos de estos países.
CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que la reciente “pausa diplomática” anunciada con las embajadas de Estados Unidos y Canadá no implica un deterioro en las relaciones bilaterales con los gobiernos de estos países. Según el mandatario, la medida está dirigida específicamente hacia los embajadores de ambos países en México, quienes han expresado su preocupación por la reforma al Poder Judicial propuesta por su administración.
En conferencia de prensa, López Obrador fue cuestionado por Grupo Healy sobre las posibles implicaciones de esta pausa diplomática. El presidente subrayó que la relación con los gobiernos de Estados Unidos y Canadá sigue intacta y que el foco de la medida es la actitud de los embajadores, especialmente en lo que respecta a sus declaraciones sobre la democracia en México.
“Imagínense que dice el embajador de Estados Unidos que si se eligen a los jueces, palabras más, palabras menos, se afecta la democracia. ¿Cómo es eso? ¿Cómo se afecta la democracia?”, expresó López Obrador. Para el presidente, la elección de jueces por parte del pueblo es una forma legítima de ejercer la soberanía popular, tal como lo establece el Artículo 39 de la Constitución mexicana.
López Obrador enfatizó que la democracia implica la participación activa del pueblo en la toma de decisiones fundamentales, y no puede estar controlada por las élites del poder económico o político. Esta postura surge en medio de una creciente tensión entre México y sus socios comerciales en el T-MEC, quienes han mostrado inquietud por las reformas promovidas por la administración de López Obrador, que buscan aumentar el control estatal sobre sectores clave y modificar la estructura del Poder Judicial.
Mientras tanto, las relaciones comerciales y de cooperación entre México, Estados Unidos y Canadá continúan, aunque este nuevo episodio añade una capa de complejidad a las ya de por sí desafiantes dinámicas entre las naciones norteamericanas.
