Los precios van desde los mil 500 hasta los 17 mil pesos. El más vendido es el árbol Douglas, conocido como el tradicional.
TIJUANA, Baja California.- En el marco de las fiestas decembrinas, los comerciantes de arbolitos navideños ya se encuentran listos para recibir a todo aquel que quiera adornar su hogar. De acuerdo con Christian Torres, encargado de un puesto de venta de árboles, las ventas inician desde los primeros días de noviembre.
“Por lo regular, entre el cinco, diez o 15 de noviembre. El año pasado nos tocó quitarnos como el 20 o 22 de diciembre, este año nos dijeron que se querían quitar el 17, pero todo depende de las ventas y cómo se vaya yendo el arbolito”, declaró.
Las ventas suben en la última semana de noviembre, aseguró el encargado, y los precios varían dependiendo el tamaño, es decir, si el arbolito es Douglas, que es el más tradicional, ya que su hoja es más delgada y está más tupido; o si es noble, el cual es más complicado de trabajarlo debido a que requiere medidas especiales de cuidados, pues es de hoja gruesa y tiene más duración.
“El Douglas de seis o siete pies está entre los mil 400, mil 500; el de siete u ocho pies entre mil 500 o 2 mil y el de ocho o nueve pies entre los 2 mil 500 o 600, más la nevada. La nevada blanca la cobramos en 500 pesos y la de color como en 700”, detalló el encargado.
El que más se llevan es el Douglas por ser más barato. En el negocio cuentan con uno noble de dos pisos de altura que tiene un precio de aproximadamente 17 mil pesos. Sin embargo, los más chicos van desde los 2 mil 500 hasta casi 5 mil pesos.
También, tienen a la venta adornos para colocarle a los arbolitos, como luces, esferas y hasta leña.
“Foquitos, nochebuenas. Este año metieron paquetitos de leña. La mitad de la gente sí compra también foquitos y adornos; los otros nomás vienen por el puro pinito”, concluyeron.
Christian Torres señaló que han visto una baja en las ventas en comparación con años anteriores. Esto se debe a la economía y a que la gente opta por colocar un árbol artificial en sus casas.
Con información de Ixshel Gómez
