Un juez federal solicitó al Senado de Argentina que permita el arresto y el juicio de la ex presidenta Cristina Kirchner, acusada de traición por supuestamente encubrir el papel de los iraníes en un ataque con bomba en 1994 contra un centro judío.
El juez Claudio Bonadio pidió a los legisladores que eliminen la inmunidad de Kirchner, la cual ganó cuando asumió como senadora la semana pasada. Ella fue presidenta de 2007 a 2015.
El juez también ordenó el arresto de varios ayudantes y aliados de Kirchner, incluido el ex secretario legal Carlos Zanni y el activista Luis D’Elia por los mismos cargos. El ex canciller Héctor Timerman recibió órdenes de arresto domiciliario debido a problemas de salud.
El fiscal Eduardo Taiano dijo que el cargo de traición conlleva una posible sentencia de prisión de 10 a 15 años, mientras que el encubrimiento con agravantes tiene una pena de seis años. Se requerirá un voto de dos tercios del Senado para que se elimine la inmunidad de la ex-presidenta.
El juez respalda una afirmación del ex fiscal Alberto Nisman de que un acuerdo de 2013 con Irán, que fue presentado como un intento conjunto de resolver el caso, en realidad aseguró que los iraníes involucrados nunca serían enjuiciados.
Cristina Kirchner y los otros acusados han negado repetidamente haber actuado incorrectamente o haberse involucrado en cualquier encubrimiento relacionado con el peor ataque terrorista de Argentina, el atentado de 1994 contra el centro de la Asociación Mutual Israelita Argentina en Buenos Aires, que mató a 85 personas e hirió a cientos. Los investigadores vincularon a ex funcionarios iraníes con el ataque, pero Irán negó cualquier conexión con el ataque y se negó a entregar a los sospechosos.
El máximo tribunal penal de Argentina aceptó el año pasado una solicitud de una coalición de asociaciones judías para volver a examinar el cargo contra Fernández, Timerman y otros funcionarios originalmente realizado por Nisman el 14 de enero de 2015.
El caso tomó un giro aún más siniestro cuando Nisman fue encontrado muerto con un disparo en la cabeza cuatro días después.
Los informes policiales iniciales y las autopsias no encontraron ninguna señal de que alguien más hubiera estado presente cuando murió Nisman, y la policía federal dijo que el fiscal se pegó un tiro.
Pero Taiano dijo en noviembre que un nuevo examen de la evidencia mostró que Nisman fue asesinado.
Con información de The Guardian
