WASHINGTON, Estados Unidos.- El 6 de enero del 2020 quedará marcado para la historia. El mundo entero hizo una pausa para voltear a ver lo que ocurría en Washington, y es que por primera vez desde 1814 el Capitolio de los Estados Unidos fue asaltado tratando de impedir que de manera oficial nombraran a Joe Biden como el próximo presidente de este país.
A las 10 de la mañana (hora local), miles de seguidores del presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunían en el centro deWashington para realizar una demostración de fuerza en el día que el Congreso debía certificar su derrota en las elecciones de noviembre.
Donald Trump, instó al vicepresidente Mike Pence a no certificar la victoria electoral de Joe Biden , repitiendo acusaciones infundadas de fraude electoral.
A las 13:00 horas, Mike Pence abrió una sesión conjunta del Congreso para certificar la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales, a la par que anunciaba en redes sociales que no detendría la certificación pese a la petición de Trump.
En menos de 30 minutos de haber iniciado la sesión, partidarios del presidente Donald Trump irrumpieron en el Capitolio, sede del Congreso de Estados Unidos, provocando la movilización de los servicios de seguridad y la suspensión de actividades.
Los manifestantes se enfrentaron a golpes con la policía, que se vio rebasada en número. En escenas nunca vistas, agentes de seguridad atrancaron los accesos y apuntaron sus armas hacia las puertas que dan entrada a una de las cámaras debido a la proximidad de la turba.
A las 15:30 horas, el Pentágono movilizó a la Guardia Nacional a Washington D. C. para dar respaldo a las fuerzas del orden.
A las 16 horas, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, ordenó un toque de queda en toda la ciuda.
A las 18 horas y, tras haber compartido diversos escritos así como un video en donde pedía a sus seguidores evacuar el capitolio, Trump fue sensurado de las redes sociales Twitter, Facebook e Instagram, por publicar contenido delicado, ya que en ellos reiteraba que el conteo de votos había sido un fraude.
Para las 20 horas, la seguridad en la sede del congreso había sido recuperada y minutos más tarde reanudaron la sesión del conteo de votos.
El saldo de los disturbios dejó cuatro muertos: una fallecida dentro del capitolio y otras tres personas que murieron en emergencias médicas. Así mismo, 52 personas fueron detenidas.
Finalmente y tras largar horas, el congreso de Estados Unidos validó la madrugada de este jueves la victoria de Joe Biden en las elecciones presidenciales, último paso antes de su investidura el 20 de enero.
Tras las protestas, los legisladores de Estados Unidos exigen y evalúan la destitución inmediata del presidente saliente Donald Trump.
Con información de Nazul Lopez
