TIJUANA, Baja California.- “Hui de la playa” fue la explicación de Martha que sentada a las afueras del puerto fronterizo de El Chaparral espera su turno para pedir asilo en Estados Unidos acompañada de sus 3 hijos de 10, 9 y 5 años.
“Huyendo de la playa, me pidieron cuota y dije que no tenía y me dijeron que si no me iba me iban a matar”, dijo Martha.
Las tardes tranquilas vendiendo fruta sobre la playa en Puerto Marqués terminaron cuando un grupo delictivo le pidió el pago de piso a cambio de permitirle continuar con su labor y perdonarle la vida.
Martha tiene una de las mil 800 fichas para entrevistarse con las autoridades estadunidenses para hacer esta petición, las cuales fueron otorgadas a centroamericanos, miembros de la caravana migrante, pero también a connacionales como ella que escapan de la violencia en México.
“Quiero estar ahí un tiempo nada más para que mis hijos estén a salvo, mientras se calma todo por allá”, indicó la mujer.
La mujer pasó la noche con los 3 menores en la calle en las inmediaciones de la garita donde la mañana de este miércoles entraron a realizar el trámite diez solicitantes a partir de la ficha 1730, por lo que Martha deberá esperar un tiempo antes de poder solicitar asilo y vivir una vida tranquila con su familia al otro lado.
Con información de Fabiola Solano.
