VIENA.- Especialistas alertaron que el exceso de luz artificial por las noches puede tener efectos negativos como alteraciones de sueño, provocar ansiedad e incluso aumentar el riesgo de padecer cáncer.
Los señalamientos fueron presentados en el foro virtual “Cielos oscuros y tranquilos para la ciencia y la sociedad” que se realiza actualmente hasta el viernes y que es organizado por la Oficina de Naciones Unidas para el Espacio Exterior (Unoosa), el Instituto Astrofísico de Canarias y la Unión Astronómica Internacional.
Se detalló que uno de los principales problemas en esto es la supresión de melatonina, hormona que se segrega en la oscuridad de la noche y que es esencial para la regulación del sueño.
Luc Schlangen, de la Universidad de Tecnología de Eindhoven, señaló que un poco de luz es suficiente para suprimir completamente la hormona, lo cual ocurre rápidamente.
En ciudades donde prevalece la iluminación artificial nocturna, la segregación de melatonina se retrasa, reduciendo el ciclo de sueño y provocando un “jet-lag social”, donde los fines de semana las personas suelen dormirse más tarde de lo habitual.
El cardiólogo de la Asociación de Medicina Estadounidense, Mario Motta, agregó que además existen numerosos estudios que asocian la sobreexposición a la luz artificial con el desarrollo de cánceres de mama y próstata.
“Hay mayores índices de cáncer de próstata y mama en personas que viven en entornos donde hay luz artificial en las calle”, dijo.
Comentó que si se padece de cáncer de mama y existe una exposición excesiva de luz artificial, el cáncer se desarrolla con más rapidez.
Se estableció que el problema se encuentra en la luz azul que producen los focos LED, que son más eficientes pero también más dañinos para la salud.
Con información de Forbes
