Dos mujeres con lazos militantes islamistas que intentaron hacer estallar un coche bomba en las afueras de la catedral de Notre Dame hace tres años fueron sentenciadas a al menos 25 años de cárcel.
Se encontraban entre los cinco miembros de una célula yihadista femenina, de entre 22 y 42 años, que fueron arrestados después de que un automóvil lleno de siete cilindros de gas fuera estacionado cerca de la bulliciosa explanada frente a la catedral de París en septiembre de 2016.
Los dos acusados principales, Inès Madani, de 22 años, y Ornella Gilligmann, de 32, habían rociado el Peugeot 607 gris con diesel en el medio de la noche e intentaron pero no lo encendieron con un cigarrillo. El tribunal escuchó que si hubiera explotado habría causado una bomba incendiaria devastadora y habría matado o herido al menos a 60 personas en un bar cercano. Fueron condenados a 30 años y 25 años de prisión respectivamente.
Los fiscales dijeron que habían estacionado el automóvil después de enviar un video que reclamaba la responsabilidad del ataque planeado a Rachid Kassim, un miembro francés de Isis. Kassim fue sentenciado en ausencia a cadena perpetua, según Le Figaro.
Madani atrajo a su compañero acusado a unirse al complot haciéndose pasar en línea como un militante islamista que había regresado de Siria y buscaba una novia, según el tribunal.
El tribunal escuchó que Madani, la cuarta de las cinco hijas de un conductor de autobús, había recurrido a las drogas y al estudio religioso después de ser agredida sexualmente a los 17 años. Una amiga cercana se había ido para unirse a Isis en Siria y el padre de Madani había advertido a las autoridades su hija también era susceptible de irse a la jihad.
Otros dos acusados, Sarah Hervouet y Amel Sakaou, que actuaron en concierto con Madani y Gilligmann, fueron condenados a 20 años.
Una quinta mujer, Samia Chalel, también fue juzgada por presuntamente ayudar a ocultar a Madani. Fue sentenciada a cinco años de prisión.
Otra mujer y un hombre recibieron sentencias menores por no informar un crimen terrorista.
Con información de The Guardian
