Más de 80 personas han sido confirmadas muertas en un ataque a un restaurante frecuentado por peregrinos musulmanes chiítas en el sur de Irak que fue reclamado por el Estado islámico.
Funcionarios iraquíes dijeron que 84 personas murieron y 93 resultaron heridas en el ataque en Nasiriyah, en la provincia sureña de Thi Qar, en Irak, el jueves por la noche. Siete iraníes estaban entre los muertos, dijo el gobernador provincial, Yahya al-Nassiri.
Nassiri añadió que el director de inteligencia de la provincia había sido removido. El Ministerio del Interior ha pedido que se le investigue.
El ataque comenzó como un tiroteo en un puesto de control y restaurante a lo largo de la carretera principal que conecta la provincia con Bagdad, seguido por dos atacantes suicidas, uno de los cuales conducía un automóvil cargado de explosivos.
El líder espiritual de la mayoría chiíta de Irak pidió al gobierno central iraquí ya los líderes locales “que emprendan responsable y profesionalmente la protección de los ciudadanos contra los terroristas”.
Los combatientes de Isis han recurrido repetidamente a ataques insurgentes a gran escala tras las pérdidas territoriales. En julio, las fuerzas iraquíes declararon la victoria contra Isis en la segunda ciudad más grande de Irak, Mosul, una victoria militar que rompió la espalda del autoproclamado califato de los extremistas.
La actividad del grupo generalmente se concentra en el oeste y el norte de Irak. Los atentados con bombas en el sur, donde la mayor parte del petróleo del país se produce y las fuerzas de seguridad tienen un apretón más estricto, son relativamente raros.
Fuentes de seguridad dijeron que las fuerzas estaban en alerta en la mayoría de las provincias del sur, incluida la ciudad petrolera de Basora, en caso de ataques similares.
Con información de The Guardian
