Según el Ministerio de Salud de Líbano, el saldo asciende a 558 muertos, incluidos 50 niños y 94 mujeres, y más de 1,800 heridos.
MEDIO ORIENTE.- Israel reanudó sus bombardeos contra posiciones de Hezbolá en Líbano la madrugada del martes, tras un día de intensos ataques que dejaron más de 500 muertos. Esto ha incrementado el temor de un conflicto regional, casi un año después del inicio de la guerra en Gaza. Los bombardeos del lunes fueron los más letales hasta el momento, afectando 1,600 objetivos terroristas en el sur de Líbano y el valle de Becá, donde se ubican bastiones de Hezbolá. Según el Ministerio de Salud de Líbano, el saldo asciende a 558 muertos, incluidos 50 niños y 94 mujeres, y más de 1,800 heridos.
El ejército israelí aseguró que entre las víctimas se encuentran muchos miembros de Hezbolá, mientras que la milicia proiraní respondió con el lanzamiento de misiles hacia Israel, alcanzando objetivos militares cerca de Haifa y en Kiryat Shmona. Miles de libaneses han huido hacia Sidón y Beirut debido a los bombardeos.
El primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció que su país enfrenta un “plan de destrucción”, y las escuelas permanecen cerradas. Israel sostiene que ha neutralizado miles de cohetes y municiones de Hezbolá, mientras que la milicia ha prometido seguir atacando hasta que cesen las hostilidades en Gaza.