Las autoridades catalanas han vinculado definitivamente la muerte de un hombre encontrado apuñalado en un coche fuera de Barcelona a los ataques terroristas de la semana pasada, elevando el número de muertos tras el atentado a 15; mientras una persecución del principal sospechoso se extendió por toda Europa.
La víctima fue identificada como Pau Pérez, un español de Vilafranca del Penedès, a 64 kilómetros de Barcelona.
Fue encontrado fatalmente apuñalado en un Ford Focus que había forzado su camino a través de un puesto de control de la policía el jueves, justo después de que una furgoneta arrollara a una multitud en el bulevar Las Ramblas de Barcelona, matando a 13 personas.
La policía había disparado al coche, hiriendo a un oficial, y al principio pensó que el hombre que encontraron en el coche había sido asesinado por los disparos. Una investigación reveló que había sido apuñalado.
La policía cree que Pérez fue apuñalado por Younes Abouyaaqoub, un ciudadano marroquí de 22 años que supuestamente condujo la furgoneta a lo largo de Las Ramblas.
Abouyaaqoub huyó de la escena del ataque a pie y se cree que mató a Pérez para tomar su coche y escapar de la ciudad.
La policía ha establecido 800 puestos de control de vehículos y triplicado el número de oficiales que trabajan en operaciones antiterroristas después del ataque, pero Abouyaaqoub sigue evadiéndolos.
El diario El País publicó imágenes el lunes de un hombre que dijo que Abouyaaqoub aparentemente hizo una escapada a pie después del atentado de la furgoneta de Barcelona. Las tres fotografías muestran a un hombre delgado de gafas de sol caminando por lo que El País dice es el mercado de La Boquería, justo al lado de Las Ramblas.
Al describir a Abouyaaqoub como a unos 1,80 metros, la policía tweeteó cuatro fotografías del hombre de pelo corto negro, incluyendo tres imágenes en las que llevaba una camiseta a rayas en blanco y negro. Es “peligroso y podría estar armado”, dijo la policía,
Con información de The Guardian
