La Ballena Gris, más hambrienta que nunca, llega a Baja California Sur (BCS) en busca de alimento, debido al cambio climático.
LA PAZ, Baja California Sur.- La Ballena Gris, más hambrienta que nunca, llega a Baja California Sur (BCS) en busca de alimento, debido al cambio climático que afecta sus áreas de alimentación tradicionales en el Ártico. A diferencia de años anteriores, estos majestuosos mamíferos marinos encuentran nutrientes en las aguas de BCS, lo que sugiere dificultades en su alimentación habitual en el Mar de Bering, Chukchi y Beaufort.
El director del Museo de la Ballena y Ciencias del Mar en BCS, Francisco Gómez Díaz, ha informado sobre la situación, destacando la observación de ballenas con un peso inusualmente bajo, indicando su falta de alimentación. Se están realizando monitoreos en zonas de avistamiento para estudiar su comportamiento alimenticio, con drones detectando intentos de alimentación en el fondo marino, particularmente de camarones.
Desde 2019 hasta 2022, se emitió una alerta por un Evento de Mortalidad Inusual (UME), que afectó a la población de ballenas grises a lo largo de su ruta migratoria, con muertes registradas en Canadá, Estados Unidos y México. Aunque el evento terminó oficialmente en 2022, aún se registran muertes y ejemplares llegan a las zonas de reproducción con bajo peso, consecuencia del calentamiento de las aguas en el Ártico.
La búsqueda de alimento en BCS podría ser una adaptación de estas ballenas al cambio climático, que está alterando su hábitat natural. Investigadores están trabajando en la identificación de nuevas zonas de alimentación y educando a prestadores de servicios turísticos y visitantes para detectar ballenas con bajo peso y así prevenir más muertes.
Hasta el momento, solo se ha identificado una ballena en estado de desnutrición en Puerto Chale, lo que resalta la urgencia de encontrar soluciones para garantizar la supervivencia de esta especie icónica.
Con información de El Sudcaliforniano