SAN JUAN, Puerto Rico.- Este sábado 31 de diciembre el mundo del beisbol recuerda al lpuertorriqueño Roberto Clemente a 50 años de su trágica muerte cuando el avión en el que transportaba ayuda humanitaria Nicaragua se fue al mar tran solo unos minutos después de despegar.
Clemente murió la víspera de Año Nuevo de 1972. Tenía 38 años.
En esa fatídica noche hace 50 años, Clemente, tres tripulantes y otro pasajero abordaron un Douglas DC-7 rumbo a Nicaragua, un país empobrecido que intentaba recuperarse de una serie de terremotos catastróficos.
Su avión de carga despegó alrededor de las 9:30 p.m. de San Juan, Puerto Rico, y las personas que presenciaron el despegue escucharon fallas en los motores. El avión alcanzó una altitud de 200 pies; luego explotó y se hundió en el Océano Atlántico.
Clemente y los demás fallecieron. Sus cuerpos nunca fueron encontrados.
The New York Times escribió sobre la tragedia el 1 de enero de 1973:
SAN JUAN, P.R., 1 de enero – Roberto Clemente, jardinero estrella de los Piratas de Pittsburgh, murió anoche en el accidente de un avión de carga que transportaba suministros de socorro a las víctimas del terremoto en Nicaragua.
Clemente en su Carrera, siempre estuvo ligado a causas nobles.
En el camino con los Piratas, visitó a niños enfermos en hospitales. En Pittsburgh y Puerto Rico, organizó clínicas de béisbol para enseñar a niños y niñas lo divertido que era el juego.
En las semanas previas a su muerte, dirigió una clínica para más de 300 jóvenes en su tierra natal.
Al igual que Buck O’Neil, Ernie Banks, Bob Feller y Minnie Miñoso, Clemente fue embajador del béisbol.
Cinco décadas después, la mayoría de las personas que siguen el béisbol aún recuerdan cómo murió Clemente.
Con información espn
