PITTSBURGH, Pensilvania.- Ben Roethlisberger tuvo otro gran partido en el que pasó para 311 yardas y dos touchdowns para el triunfo de los Acereros de Pittsburgh sobre los Broncos de Denver 26 a 21.
Para los Acereros fue su segunda victoria de la temorada con otro excelente juego de Big Ben.
El quarterback titular de Denver, Drew Lock, se fue pronto del partido, en el primer cuarto por una lesión en el hombro derecho.
Jeff Driskel fue quien entró a los controles de Denver y completó 18 de 34 envíos para 256 yardas y dos touchdowns con una intercepción, además de sufrir una enorme cantidad de castigo físico de parte de la defensiva de Pittsburgh.
Los Acreros lograron siete capturas de de mariscal, seis de ellas a Driskel, a quien le llegaron hasta 19 ocasiones.
Lock dejó el juego al concluir la segunda serie ofensiva de Denver y no volvió después de lastimarse el hombro derecho en un golpe con el linebacker Bud Dupree. Driskel, quien no tuvo victoria en tres inicios la campaña anterior antes de perder la titularidad con Lock, tuvo una actuación valerosa a pesar de estar bajo presión durante buena parte de la jornada.
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