Brasil establece un nuevo récord de homicidios en 63,880 muertes

Brasil rompió su propio récord de homicidios el año pasado, de acuerdo con nuevas cifras que muestran que 63,880 personas fueron asesinadas en 2017, un aumento del 3% con respecto al año anterior.

Los datos del Foro de Seguridad Pública Brasileño independiente indicaron que un promedio de 14 personas moría a manos de policías todos los días, un aumento del 20% respecto del año anterior.

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Las violaciones también aumentaron un 8% a 60.018, mientras que los asesinatos de mujeres aumentaron un 6,1% a 4.539.

“Es un escenario devastador”, dijo Renato Sérgio de Lima, director del foro, quien dijo que las cifras de homicidios se habían visto exacerbadas por leyes anticuadas y procedimientos policiales y por el crecimiento del crimen organizado. La mayoría de las víctimas eran jóvenes, hombres negros de zonas urbanas pobres, dijo.

“Las cifras muestran que tenemos un grave problema con la violencia letal”, dijo.

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Es probable que las escalofriantes estadísticas jueguen en las elecciones de octubre, donde el crimen es un tema clave para muchos votantes. El candidato presidencial derechista Jair Bolsonaro lidera algunas encuestas en una plataforma que incluye aflojar los controles de las armas y dar a la policía más licencias para matar.

“Tenemos dos fenómenos persistentes: la violencia contra las mujeres y las bandas criminales que manejan drogas y armas”, dijo Lima.

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Recientemente, los brasileños se horrorizaron con una oleada de feminicidios, incluida la muerte de la abogada Tatiane Spitzner, cuyo esposo, Luís Felipe Manvailer, fue filmado por cámaras de seguridad que la atacaron en el edificio de apartamentos antes de que muriera desde su apartamento en el cuarto piso. Él ha sido acusado de su asesinato.

Elisandro Lotin, sargento de policía en el estado de Santa Catarina en el sur de Brasil y presidente de una asociación nacional de policía, dijo que muy pocos asesinos terminan en la cárcel y las autoridades se concentran en reprimir a los delincuentes en lugar de prevenir el crimen.

“Hay una impunidad sobre los crímenes de homicidio en Brasil”, dijo Lotin.

Según el Instituto Igarapé de Río, un centro de estudios especializado en temas de seguridad, solo el 10% de los homicidios conducen a arrestos y solo el 4% a cargos.

“Los brasileños aún no se han dado cuenta del problema”, dijo Rob Muggah, cofundador y director de investigación. “Las autoridades nacionales, estatales y municipales de Brasil necesitan urgentemente priorizar la reducción de homicidios”.