Bajo una doble avalancha de calentamiento global y calefacción urbana localizada, algunas de las ciudades del mundo podrían aumentar la temperatura hasta 8ºC de calor para el año 2100, según han advertido los investigadores.
Tal aumento de la temperatura tendría consecuencias nefastas para la salud de los habitantes de las ciudades, robar a las empresas y las industrias de trabajadores capacitados, y ejercer presión sobre los recursos naturales ya agotados, como el agua.
La proyección se basa en la hipótesis del peor caso de que las emisiones de gases de efecto invernadero continúan aumentando a lo largo del siglo XXI.
El cuarto más alto de las ciudades más pobladas, en este escenario, podría ver las temperaturas subir 7 C o más a finales del siglo, según un estudio publicado en la revista Nature Climate Change.
Para algunos cerca de 5 C del total se atribuirían al calentamiento global promedio.
El resto se debe al llamado efecto “isla de calor urbano”, que se produce cuando los parques, represas y lagos, que tienen un efecto de enfriamiento, son reemplazados por ciudades de hormigón y asfalto más cálidas que sus alrededores, dijeron los investigadores.
“El top 5% [de las ciudades por población] podría ver aumentos en las temperaturas de alrededor de 8C y mayores”, dijo el coautor del estudio, Francisco Estrada, del Instituto de Estudios Ambientales de los Países Bajos.
Estrada y un equipo usaron diferentes proyecciones del calentamiento planetario promedio, combinadas con el efecto UHI y los daños potenciales, para estimar los costos futuros del calentamiento en las ciudades.
La ciudad mediana, en el centro de la franja, pierde entre el 1,4% y el 1,7% del PIB por año para 2050 y entre el 2,3% y el 5,6% para el año 2100, concluyen.
“Para la ciudad más pobre, las pérdidas podrían llegar hasta el 10,9% del PIB para el año 2100”, escribió el equipo.
Con información de The Guardian
