TIJUANA, Baja California.- Lejos de ser un espacio en el cual las familias pueden confiar en que sus familiares van a librarse de las adicciones, los centros de rehabilitación en el país se han convertido en la cartera de clientes para los grupos del narcotráfico.
Prueba de ello es la cédula criminal de once individuos que fueron reclutados por el Cártel de Sinaloa en Mazatlán y que la Fiscalía General del Estado capturó en Mexicali.
Ante la preocupante situación en la que se encuentran los centros de rehabilitación en la región, el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Publica de Baja California (Ccspbc), Juan Manuel Hernández Niebla, declaró que ha mantenido reuniones con la Secretaría de Salud del estado y los institutos contra las adicciones de Tijuana y Mexicali con el fin de hacer un registro de las personas que ingresan, así como un diagnóstico de su entorno para evitar que los adictos mueran a manos del crimen organizado.
Señaló que actualmente los centros de rehabilitación en Baja California carecen de estrictas medidas de seguridad por lo que pidió a las autoridades a tomar el tema y revisar las medidas en torno a la prevención de adicciones con el fin de evitar que los jóvenes terminen en estos lugares.
Juan Manuel Hernández Niebla consideró que las diferentes corporaciones policiacas en la entidad deben incrementar los patrullajes en los alrededores de los centros de rehabilitación.
Con información de: Miguel Martínez
