Un incendio en un centro comercial en la ciudad de Kemerovo, al centro de Siberia, dejó al menos 64 muertos, muchos de ellos niños.
El Ministerio de Emergencia de Rusia dijo que seis personas siguen atrapadas entre los escombros del ardiente centro comercial Winter Cherry en Kemerovo.
El incendio estalló en el centro comercial en un concurrido domingo por la tarde y rápidamente envolvió el último piso del edificio, extendiéndose a través de una pista de patinaje sobre hielo para niños, un centro de juegos y un cine de dos pantallas.
Las imágenes mostraban un espeso humo negro que salía del centro comercial de baldosas blancas y amarillas, mientras los bomberos continuaban luchando contra las llamas después de la caída de la noche.
Todavía no está claro qué desencadenó el incendio, que se apagó el domingo por la noche. dijeron Autoridades el lunes.
La sección del centro comercial que alberga las pantallas de cine colapsó durante el incendio, informó el lunes el Ministerio de Emergencias de Rusia.
“Este centro comercial en varios pisos estaba lleno de gente a mediodía del domingo. Nadie sabe exactamente cuántas personas había dentro cuando estalló el incendio “, dijo en un comunicado Alexandre Eremeyev, un funcionario del ministerio local de servicios de emergencia de Siberia.
“¿Dónde buscar gente? ¿Cuántos hay? Eso ha complicado mucho el trabajo de los bomberos “, dijo, según Reuters.
Los testigos le han dicho a varias agencias de noticias rusas que las alarmas de incendio en el centro comercial no se activaron a pesar del denso humo que llenaba el último piso, y que la avalancha de gente que intentaba escapar del fuego se convirtió en una estampida.
Los investigadores dijeron que habían abierto varias investigaciones criminales en el fuego por negligencia que condujo a la muerte de dos o más personas y por violaciones a la seguridad contra incendios.
La cifra de muertos del domingo fue una de las peores en un solo día por un incendio en Rusia en la última década. Un incendio de 2009 en la discoteca Lame Horse en la ciudad de Perm, al norte de Siberia, dejó 156 muertos, mientras que 38 murieron en 2013 en un incendio en un hospital psiquiátrico en Ramensky, un pueblo cerca de Moscú.
Con información de The Guardian
