Lori Lightfoot ha ganado una histórica victoria aplastante en la segunda vuelta electoral de la alcaldía de Chicago, convirtiéndose en la primera mujer negra y la primera persona abiertamente gay en ocupar el cargo más alto en la tercera ciudad más grande de Estados Unidos.
“Juntos, podemos y finalmente pondremos los intereses de nuestra gente, toda nuestra gente, por delante de los intereses de unos pocos poderosos”, dijo Lightfoot en su discurso de victoria el martes por la noche, prometiendo poner fin a la violencia armada de la ciudad. , y “romper el interminable ciclo de corrupción de esta ciudad”.
“Juntos, podemos y haremos que Chicago sea un lugar donde su código postal no determine su destino”, dijo.
Los últimos resultados mostraron que Lightfoot, de 56 años, quien capitalizó su estatus de forastero en una ciudad definida durante mucho tiempo por la política interna, ganó cada una de las 50 salas de la ciudad. El candidato a la reforma derrotó a Toni Preckwinkle, quien durante meses fue visto como el favorito para ganar, y sucederá al alcalde saliente, Rahm Emanuel, más adelante en la primavera.
Una multitud de simpatizantes que llenaron el recargado Hilton Chicago Grand Ballroom en el centro de la ciudad el martes por la noche estalló en fuertes gritos cuando los medios convocaron la elección de Lightfoot, menos de una hora después del cierre de las urnas. Cuando el alcalde electo subió al escenario poco después de las 9 pm hora local, los simpatizantes, algunos de los cuales portaban carteles con el eslogan de su campaña, “Trae la luz”, cantaban el nombre de Lightfoot.
“Ahí afuera esta noche muchas niñas y niños están mirando. Nos están mirando y están viendo el comienzo de algo, bueno, un poco diferente “, dijo Lightfoot a la multitud. “Están viendo una ciudad renacer”.
Lightfoot nunca ha ocupado cargos electivos, pero ha desempeñado otros cargos en el gobierno de la ciudad, especialmente como jefe de la junta de policía de Chicago y su equipo de trabajo de responsabilidad policial, que fue establecido por Emanuel en 2015 en medio de la indignación por el manejo de su gobierno del asesinato de El adolescente negro Laquan McDonald por un ex oficial de policía blanco, Jason Van Dyke, quien fue condenado en 2018.
Lightfoot tomará las riendas en un momento difícil para la ciudad, que continúa enfrentando altos índices de violencia con armas de fuego, un sistema de educación precaria y enormes problemas financieros, entre los que destaca una crisis de fondos de pensiones.
Algunos activistas LGBT en Chicago lamentaron la victoria de Lightfoot, argumentando que sus vínculos con la policía y su oposición al control de alquileres “caen en un legado de décadas de supresión política anti-gay y anti-trans”.
