Cinco ejecutados en Guanajuato en menos de 24 horas

 

GUANAJUATO, Gto. (apro).- Cinco personas, entre ellas dos mujeres, fueron asesinadas entre la noche del miércoles y la mañana de este jueves en la entidad, y dos elementos policiacos resultaron heridos por arma de fuego.

- Publicidad-

Uno de estos últimos, José de Jesús Hernández, de 32 años, fue atacado esta mañana en León –entre las 6:30 y las 8 de la mañana–, presuntamente en el trayecto entre su domicilio y la Delegación Sur de Seguridad Pública, a donde se dirigía para entrar a su turno de trabajo.

El uniformado recibió diversos disparos en el rostro, por lo que de inmediato fue trasladado a un sanatorio privado, donde se montó un operativo para custodiarlo.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública municipal, Hernández ha laborado por 17 años en la Policía leonesa.

- Publicidad -

Casi a la misma hora, en la avenida México-Japón de Celaya, por donde circulaban en un automóvil Sentra, los policías Cesárea Saavedra Jiménez, de 39 años de edad, y José Hurtado Fuentes, policía tercero de 43 años, fueron atacados por los ocupantes de un automóvil Eclipse negro que los alcanzó por las vías del tren, en la salida a la comunidad de San Miguel Octopan, y les dispararon en repetidas ocasiones.

La mujer murió en el lugar de los hechos y su compañero fue trasladado a un hospital para recibir atención médica por las lesiones sufridas.

- Publicidad -

Ayer, cerca de las 11 de la noche, se encontró el cuerpo de un hombre a un costado de un camino de terracería rumbo a la comunidad de San Elías, también en Celaya. La víctima, Sabino Corona Lozano, de 40 años de edad, presentaba golpes contusos en el cuerpo y el rostro.

Se trata de un vecino de la comunidad de San Juan de la Vega, cuyo hermano dijo a las autoridades que aquel salió con un amigo con quien estaba ingiriendo bebidas alcohólicas y después no supo de él, hasta que los vecinos le dijeron que estaba tirado en el camino.

En Juventino Rosas, un hombre y su hija fueron asesinados en el interior de una camioneta Navigator con placas del extranjero que se encontraba estacionada en un campo de cultivo, entre dos comunidades de ese municipio.

Los cuerpos de Bernabé Valerio Centeno, de 58 años de edad, y su hija Dulce Tania, estaban en los asientos del conductor y el copiloto, respectivamente.

La Policía Municipal localizó los cadáveres después de recibir llamadas en las que se avisaba que se habían escuchado disparos en el lugar.

En Uriangato, al sur del estado, vecinos de la comunidad El Derramadero encontraron el cadáver de un hombre entre unos sembradíos. La víctima tenía huellas de una fractura en el brazo izquierdo y manchas de sangre en el estómago.