Los cuerpos de dos hombres y dos mujeres fueron descubiertos en los escombros de dos edificios en ruinas que se derrumbaron en el centro de Marsella el lunes.
“Todavía estamos viendo que hay entre cinco y ocho víctimas; Gente de la que no tenemos noticias “, dijo el fiscal de la ciudad, Xavier Tarabeux.
El ministro del interior francés, Christophe Castaner, dijo que la operación de rescate fue “meticulosa y delicada”, muchas de las cuales debían llevarse a cabo a mano. “Los buscadores han encontrado algunos bolsillos de supervivencia, por lo que quizás haya esperanza de que haya personas que aún estén vivas”, agregó.
Cerca de 80 bomberos estaban peinando a través de los restos. Se está gestando una disputa política sobre la condición de los dos edificios, ya que los funcionarios revelaron que cerca de 6.000 propiedades en Marsella estaban en un estado ruinoso.
Castaner dijo: “Estoy aquí para acompañar a los hombres y mujeres que intentan salvar vidas. La polémica puede llegar más tarde, la investigación ahora. Todo el mundo está tratando de salvar vidas. Esa es la urgencia. Mientras haya esperanza, el servicio de bomberos continuará luchando para salvar vidas “.
El ministro dijo que el edificio que estaba ocupado, No. 65 rue d’Aubagne, había sido sometido a una “inspección técnica” el 18 de octubre. Si bien surgieron inquietudes sobre su estado, no se tomó la decisión de evacuarlo.
Renaud Muselier, presidente de la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, dijo: “Los equipos han trabajado toda la noche en condiciones difíciles. Ha estado lloviendo por lo que es complicado. Lo único positivo es que han encontrado posibles espacios para respirar “.
No 63 fue abandonado y supuestamente vacío, pero pudo haber sido ocupado por ocupantes ilegales. Se cree que cayó primero, derribando el número 65, que estaba ocupado, y dañando parcialmente el no 67, que obligaron a los servicios de bomberos a derribar por completo.
“El riesgo es que sea una casa de naipes. Era un edificio en ruinas, pero había propietarios e inquilinos allí. No era un barrio bajo “, dijo Muselier.
Los edificios cedieron a partir de las 9 de la mañana del lunes. A lo largo de la noche, los servicios de emergencia revisaron los escombros de 15 metros de profundidad que dejó el derrumbe.
